La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Triana resiste incluso en la pandemia

Una multitud acude a las zonas comerciales de la capital en busca de ocio y de las últimas compras en la víspera de Reyes | Notable presencia policial en las terrazas

Vista de la calle Mayor de Triana en su plenitud -a la altura de la subida de San Pedro- a eso de las siete de la tarde en esta víspera de Reyes.

Desde primera hora de la mañana y hasta prácticamente la media noche miles de personas se acercaron ayer, como cada 5 de enero, a la zona comercial de Triana. Las colas se sucedían a las puertas de numerosos establecimientos en busca del último detalle o del tradicional roscón de Reyes. No hubo cabalgata de Sus Majestades de Oriente, tampoco conciertos, barras en el exterior de los bares y restaurantes o eventos en la calle con el objetivo de evitar nuevos focos de contagio del virus; pero, aún así, la Calle Mayor resistió incluso en pandemia.

Con una notable presencia de agentes de la Policía Local y de la Nacional, con el fin de asegurar que se respetaran las normas de seguridad sanitarias, Triana se mostró por momentos como una auténtica cabalgata de Reyes pero sin sus protagonistas de siempre: Melchor, Gaspar y Baltasar. Una multitud con mascarilla que llenó las zonas comerciales en un momento en el que Gran Canaria vive un repunte de contagios de Covid-19 tras los últimos festivos de Nochevieja y Nochebuena. Y es que más allá de la falta de conciertos y eventos, en los bares y las tiendas se trabajó a destajo. Especialmente al caer la noche, momento en el que las terrazas colgaron el cartel de lleno y los agentes vigilaron puntos calientes -Cano, San Bernardo o Lagunetas-.

Las terrazas volvieron a estar llenas por Reyes, como se ve en la foto.

“Se nota que es la víspera de Reyes, pero al mismo tiempo, no es igual a otros años”, señaló tajante Patricia Campos en la juguetería Niki. La tienda estaba llena, los juguetes estrella de las navidades agotados desde hace días, pero, al igual que en otros establecimientos, han notado durante toda la campaña un comportamiento muy concreto: precaución y contención del gasto. “Venir vienen a comprar, pero miran más el bolsillo”, matizó la encargada de este establecimiento.

Aún así, Sus Majestades llevarán regalos este miércoles a miles de niños y niñas. Los muñecos de Baby Yoda, del Hada Voladora y la gama de dinosaurios Indominus Rex han sido los juguetes que más han aparecido en las cartas escritas por los más pequeños de la casa. Los juegos de mesa son otro clásico, según relata Patricia Campos. El Twister, Operación o el ¿Quién es quién? han vuelto a estar en las cartas de numerosas familias canarias un año más.

Y es que los adultos han demostrado en este último año de pandemia que también quieren jugar, porque nunca es tarde para ser un niño y volver a la infancia. “En la desescalada vendimos casi casi más que en la pasada campaña de Navidad, mucha gente vino para comprar juegos de mesa, cartas y entretenimiento para jugar en casa en familia o entre amigos”, señaló ayer Patricia Campos.

Triana resiste incluso en la pandemia

En Reyes reinan los clásicos, también en pandemia. Buena parte de las joyerías de la zona Triana tuvieron este martes un día muy ajetreado. “La vente va muy bien”, apuntó una de las dependientas de la Joyería Esmeralda, en la calle Mayor, entre cliente y cliente. Eso sí, en muchas de estas, al igual que en otro tipo de establecimientos, era necesario hacer cola. Son numerosas las tiendas que, dadas su escasa superficie, cuentan con aforos limitados para poder asegurar a sus clientes las pertinentes distancias de seguridad.

Las perfumerías vivieron también su particular agosto. “Hemos vendido un poco de todo, aunque se nota bastante que la venta ha sido más floja, hay prudencia por el virus y en el gasto”, señaló Raju Daswani, encargado de Perfumerías Sabina. “Pero lo cierto es que muchos clientes se han pasado al negocio online, en estos meses hemos crecido mucho con la tienda virtual; es algo que ha venido para quedarse, ya es el presente”, apuntó el empresario.

Triana resiste incluso en la pandemia

La pandemia ha modificado muchos hábitos de vida, también en el mundo de la cosmética. “En perfumes piden de todo, pero han destacado productos que antes no se llevaban”, explicó Sonia Cabrera Pérez, dependienta en Perfumerías Sabina. Las mascarillas faciales, para proteger la cara de posibles irritaciones en la piel provocadas por las sanitarias; geles de manos para evitar los perjuicios de los geles hidroalcohólicos o kits de maquillaje para resaltar los ojos, detalló. “Son cosas que antes solo compraba quien se cuidaba mucho”, apuntó.

Colas para pagar en las tiendas, algunas abrieron hasta la medianoche como en cualquier año no pandémico, y colas para pillar un roscón de Reyes. Los clásicos no fallan. “Vine a Triana solo para comprarlo aquí, para mí es de los mejores, la crema de turrón es muy suave”, señaló Fátima a las puertas de la Dulcería Reyes por tercer año consecutivo cuando el reloj marcaba poco más de la una de la tarde. En su caso no tenía que comprar nada más, fue previsora, “sabía que hoy vendría mucha gente y quita quita”, apuntó a la espera del pastel esta vecina del capitalino barrio de San José.

La lotería de El Niño es otro clásico de estas fechas. A las puertas de la administración El Gordo de Triana una cola se entremezclaba con las terrazas poco antes de la hora de la comida. “Paso por aquí siempre y compro, nunca se sabe”, apuntó Domingo Robaina, quien llevaba esperando unos 20 minutos por su décimo. De hecho, hace justo un año la diosa fortuna -el 6 de enero de 2020- tocó las puertas de este local; el primer premio de este sorteo extraordinario volvía a la capital grancanaria después de 30 años de sequía en esto del azar. Y, sin ir muy lejos, el pasado 22 de diciembre un quinto premio cayó en este punto de venta.

Triana resiste incluso en la pandemia

Calzado deportivo

La ropa y el calzado tampoco faltan en estas fechas. “Las ventas han flojeado”, indicó Evelyn en Foot on Mars, una tienda de calzado deportivo. Aún así, crisis y ertes mediante, las Nike Air Jordan han sido el no va más entre los jóvenes y no tan jóvenes. Y es que la campaña se ha ido “animando poco a poco”, tal y como apuntó una comerciante en una de las transversales de Triana. “Es verdad que se notó la falta de fiestas y eventos, pero la gente se ha llevado vestidos o complementos que pueden llevar en otras ocasiones durante el resto del año, piezas no tan exclusivas”, apuntó. Es más, en su caso pudieron anular varios de los pedidos que ya tenían hechos de cara a las no fiestas de Navidad, “pudimos recuperar parte de la inversión, es algo que los proveedores entendieron”, explicó. La ilusión también se palpó en las librerías, donde las ventas han crecido en estos meses pandémicos, según han podido constatar los propios libreros. Incluso algunos títulos se han agotado a la espera de una nueva edición de ejemplares. Es el caso de la novela Panza de burro, de la tinerfeña Andrea Abreu. Más de uno llegó ayer a los establecimientos en su búsqueda, tanto por la mañana como durante la tarde, pero se vieron obligados a elegir otras opciones o a darse media vuelta y esperar a que vuelva a las estanterías.

A última hora de la tarde, la multitud comenzó a dispersarse de manera tímida. Las primeras tiendas empezaron a bajar la persiana a eso de las nueve de la noche y los agentes centraron sus miradas en las transversales de Triana con la intención de evitar aglomeraciones en las terrazas de bares y restaurantes. De hecho, estaba previsto vigilar ciertas calles de las zonas comerciales de la capital con el dron de la Policía Local. Misma labor en puntos habituales de botellones -caso de la plaza de Las Ranas-. Y es que no había conciertos o barras, pero no dejaba de ser la noche de Reyes.

48

Compras de última hora para Reyes en Triana Juan Carlos Castro

Compartir el artículo

stats