El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria registró 341 sanciones durante el pasado año por infracciones tipificadas en la nueva ordenanza municipal sobre Protección y Tenencia de Animales (OMPTA), lo que supuso un 4,2 % menos respecto al año anterior (356).

Según ha informado este martes el Ayuntamiento en un comunicado, las infracciones más comunes fueron por circular por vías públicas con la mascota sin correa, cadena o collar, o sin bozal, en el caso de los perros que tienen antecedentes de haber mordido o aquellos que demuestren agresividad.

A finales de febrero de 2020 entró en vigor la nueva ordenanza, que sustituyó a la de 1997 e incorporó nuevas reglas sobre la tenencia y protección de los animales.

Esta ordenanza impone la obligación de identificar a todos los perros y gatos con microchip, así como al resto de animales de compañía, con algunas excepciones en estos últimos, y su incumplimiento es considerado como un infracción grave que conlleva sanciones de entre 150,26 a 1.502,53 euros, indica la nota.

El concejal de Salud Pública, Luis Zamorano, ha destacado que se trata de "un documento adaptado a los tiempos actuales, que sirve de referencia para otros municipios de la isla, que se ha elaborado contando con una amplia participación de organizaciones y colectivos que velan por el bienestar de los animales”.

El edil ha recordado que el "objetivo no es recaudar, sino concienciar a la ciudadanía. De hecho, hay ocasiones -dependiendo de la situación- en las que informamos previamente, antes de proceder o no a sancionar, ya que la normativa está orientada a las personas y a las mascotas, no al revés”, ha referido.

Zamorano ha considerado que “como en tantas otras normativas, el correcto cumplimiento de esta ordenanza por parte de la ciudadanía tiene enormes beneficios para la ciudad, tales como la limpieza y salubridad de nuestras calles y edificios, la sanidad y el bienestar animal y la convivencia respetuosa entre los propietarios de animales y el resto de vecinos”.