El Cabildo de Gran Canaria ha puesto en marcha este miércoles un nuevo punto de recarga rápida en la Avenida Marítima de Las Palmas de Gran Canaria para que los vehículos eléctricos puedan obtener la energía suficiente para recorrer unos 100 kilómetros en apenas 15 minutos.

Según ha explicado la Corporación insular en un comunicado, el uso de este punto de recarga rápida costará dos euros, el tercio de lo que costaría utilizar fuel, y estará ubicado junto al Centro Insular de Deportes para formar parte de la Red Insular de Recarga de Vehículos Eléctricos de Gran Canaria que ya cuenta con 20 puntos operativos en diferentes municipios de la Isla, a los que en breve se unirá el de San Mateo.

La inversión que ha llevado a cabo el Cabildo en la instalación de este nuevo punto de recarga rápida asciende a los 50.000 euros, siendo la inversión total de toda la Red de alrededor de 575.000 euros.

El Cabildo ha destacado que la potencia de este nuevo punto rápido permite dejar el coche listo para recorrer la Isla de norte a sur en el tiempo en que se toma un café.

Y, además, ha agregado que la distribución de los distintos puntos, todos ellos para dos vehículos, posibilita recorrer Gran Canaria con tranquilidad, ya que todos ellos se encuentran a un máximo de 40 kilómetros de distancia entre sí por lo que siempre habrá uno de ellos "a mano, lo que estimulará la expansión de la movilidad eléctrica".

Aparte de contar con puntos de recarga pública cuyos precios además son domésticos, se suman los abiertos en gasolineras, restaurantes, aparcamientos, centros comerciales y grandes superficies, que por ley deben ofrecer uno por cada cuarenta plazas.  

Esa posibilidad es lo que hace que estos coches sean tan importante para el futuro verde de Gran Canaria, pues esa carga nocturna hará que aprovechen la energía producida por renovables, previsiblemente cada vez más, de modo que actuarán como pilas de almacenamiento de energía que se usará mayoritariamente en horas diurnas, las denominadas horas pico, reza el comunicado insular.

Tras el periodo de prueba, los puntos han pasado a ser de pago por ley, de modo que cargar en los puntos semirrápidos cuesta 0,15 euros el kilovatio hora los diez primeros minutos y 0,25 los siguientes entre las 7 y las 22 horas, en tanto que a partir de las diez de la noche y hasta el amanecer resulta aún más económico, lo que reduce el coste medio para recorrer 100 kilómetros de 2,2 euros a 1,3, capacidad que se alcanza en unas dos horas.  

En cuanto a los puntos de carga rápida, la tarifa es plana de 0,125 euros por minuto la primera media hora y de 0,21 los siguientes treinta.