La hostelería de la capital grancanaria alaba el auto del Tribunal Superior de Justicia Vasco en el que se afirma que este sector no es “un elemento de riesgo” para contraer el coronavirus y, por tanto, permite la reapertura de los bares y restaurantes que se encontraban cerrados, contradiciendo el decreto de nivel de alerta roja que había decretado el Gobierno de Euskadi.

El fallo, que empezó a aplicarse desde ayer mismo, respondía a la petición que se había hecho a este tribunal, por parte de los hosteleros, para la toma de medidas cautelares y para poder continuar trabajando con sus negocios en los municipios en los cuales se encontraban cerrados por el elevado número de afectados. Decisión que la mayoría de los encargados o trabajadores de los bares y restaurantes de la zona de Triana y alrededores consideran “inteligente “y esperan que aquí se tenga en cuenta.

“Es una buena noticia, aunque allí la situación es muy diferente”, señala José Rodríguez

Así, Eladio Rodríguez, gestor del Café Madrid, subraya que los bares y restaurantes no son un foco de contagio. “Aquí se mantienen mucho las reglas sanitarias”, asegura. “Y somos los primeros en preocuparnos en no contagiarnos, utilizando las mascarillas y manteniendo la higiene”, añade. “Parece que los pequeños negocios somos los culpables de todo, pero en los grandes almacenes no se cumple nada y aunque al llegar ves a un vigilante para mantener la distancia, una vez dentro la gente hace lo que le da la gana”, subraya.

En su opinión, “la medida resulta lógica” y añade que “nuestro clientes es de media una persona mayor que viene con mucho miedo y somos los primeros que queremos que estén cómodos”.

Imagen de El Gallo Negro

De una forma parecida opina Johnny Velázquez, de El gallo Negro, que subraya que “me parece bien porque la hostelería no tiene culpa”, y sostiene que “nosotros creemos que las partes más desinfectadas, más limpia y donde menos posibilidades tienes de coger el virus son los restaurantes”. Este profesional recuerda que el auto, que ha sido emitido por la Sala de los Contencioso-Administrativo de dicho tribunal, señala que, con las limitaciones de aforo y con las medidas sanitarias como el uso de mascarillas, la hostelería no parece un elemento de riesgo cierto y grave para la salud pública.

“Con esta decisión ya no sabes de qué tipo de expertos puedes fiarte”, aclara Buchi Ennaji

José Miguel Rodríguez, propietario del Yantar, también elogia el auto vasco, aunque añade que no se puede hacer la misma lectura porque “allí no se habían habilitado terrazas como en Canarias”. En su opinión, el Gobierno debe seguir a los tribunales y “debe dar la garantía de espacio abiertos si queremos recuperar el turismo”. La decisión de los jueces es correcta, pero “yo me centraría ahora más en habilitar más espacio”.

Celia Angulo, una de las propietarias del Café bar El Perojo, señala, sin embargo, que todas las medidas deben depender del número de afectados. “Si hay demasiado casos quizás deberían tomar medidas más restrictivas y es sanidad quien tiene que controlarlo”. Pero, desde su punto de vista, el tribunal vasco ha estado correcto porque “no creo que los bares sean un mayor foco de contagios”.

Finalmente, Buchi Ennaji, propietaria del restaurante El Aroma de Jazmín, no deja de mostrar cierta inquietud ante esta nueva decisión. “Lo que te da un poco de miedo es pensar que se tomen este tipo de medidas ahora cuando antes otro comité de expertos decidió que los restaurantes éramos foco de contagio y ahora un tribunal declara que no”. En este caso, la pregunta es “en qué se basaron los primeros para tomar esa medida” y su sensación es la de que “ya no sabes ni de quién te fías”, pero subraya que “los bares y restaurantes estamos cumpliendo toda la normativo por nosotros y, sobre todo, por los clientes”.