La Concejalía de Urbanismo ha eliminado el proyecto de construcción de dos edificios de tres y cinco plantas en el callejón del Bosque, también conocido como el callejón de la plazoleta de Perojo, donde en la actualidad existen un conjunto de 19 casas terreras. La zona, que linda con la plaza del Padre Hilario se ha conservado tal cual fue construida a principios del siglo pasado, encajonada entre los edificios de mayor altura de Murga, León y Castillo y Núñez de la Peña.
La eliminación de la actuación de dotación, que además de los dos edificios contemplaba una plaza y nuevos accesos se debe a la petición de los vecinos afectados, según figura en el expediente de modificación menor del Plan General de Ordenación (PGO) que, además de descartar las nuevas construcciones, contempla la anulación de la norma zonal P y su sustitución por la M para aumentar una planta en los edificios del barrio de Canalejas.
El aumento sólo afecta a 16 parcelas porque el resto supera ya no puede subir lo permitido
Los propietarios de las casas terreras del callejón del Bosque, que fue uno de los escenarios del rodaje de la película Allied en la capital, mantuvieron una reunión con el concejal de Urbanismo Javier Doreste y los técnicos en la que “expusieron su rechazo a la actuación de dotación y manifestaron su deseo firme de conservar su situación actual”, señala el expediente que añade: “por esta causa y dado que la referida actuación de dotación surgió como una posible mejora de las condiciones urbanísticas de esta calle pero no responde al concreto objetivo de esta modificación se decidió retirarla de la propuesta”.
En realidad, la modificación de altura que permite la eliminación de la norma P (máximo tres plantas) apenas tendrá efectos prácticos según las técnicas municipales porque la mayoría de los inmuebles del barrio tienen ya cuatro plantas o más. Lo que viene a hacer esta reforma es adaptar la norma a los hechos consumados.
La construcción de esos dos inmuebles, ahora eliminados, constituía la principal novedad de esta modificación del PGO, cuyo aumento de las alturas sobre el papel permite dos objetivos: adaptar la normativa urbanística a “la realidad de la zona del entorno de Perojo” y dar cumplimiento a una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) de 2016, que anuló la protección del inmueble situado en la calle Canalejas número 21 y obligó a aumentar el número de plantas asignadas a dicha parcela, declarando nula, de paso, la norma zonal P y el máximo de tres alturas que esta fija. Se trata, señala la modificación, de sustituir la norma P y aplicar la ordenanza M por “coherencia urbanística”. De hecho, el 67% de las parcelas cuya altura normativa se propone elevar ya tienen dicha altura o más y sólo 29 no superan los tres pisos. Sin embargo, “de las 29 parcelas que podrían materializar dicho incremento 13 podrían actualmente hacerlo efectivo a través de un estudio de incidencia ambiental”, por lo que en la práctica el cambio de norma sólo afectaría a 16 parcelas.
La nueva norma lo que hace es adaptar el papel a los hechos consumados
El ámbito en el que se inscribe esta regulación -que deja fuera el BIC de Perojo que ya tiene su propia normativa- está conformado por 342 parcelas, de las cuales 119 están incluidas en el catálogo de protección. En el papel, la modificación afectaría a 99 parcelas, pero la inmensa mayoría ya tiene cuatro plantas o más. Esta modificación del PGO de ordenación, que ya cuenta con el informe favorable de impacto ambiental, fue aprobada por la junta de gobierno municipal el 26 de noviembre de 2020 y dictaminada la pasada semana por la comisión de pleno de Desarrollo Sostenible para su aprobación inicial.
