Los trabajadores de la Isla perdieron ayer a uno de los abogados laboralistas más combativos de las últimas décadas: Joaquín Sagaseta de Ilurdoz Paradas, conocido también por su militancia política en la izquierda desde que entró en las Juventudes Comunistas y posteriormente en el Partido Comunista, cuando estas organizaciones estaban en la clandestinidad durante la dictadura Franquista, hasta su participación en Podemos. Quino Sagaseta, como era conocido, falleció a los 68 edad. Amigos y compañeros destacaban este jueves su gran compromiso social y lo excelente persona y profesional que era.
Nacido en Las Palmas de Gran Canaria en 1952, Joaquín Sagaseta estudió Derecho en la Universidad de La Laguna, y desde sus inicios ejerció como abogado laborista al mismo tiempo que comenzaba su actividad política. No en vano tenía un gran referente en su propia familia: su tío Fernando Sagaseta. Así lo reconoció él mismo en un artículo publicado en este periódico durante el homenaje que el Colegio de Abogados de Las Palmas le hizo al también abogado y político, a los veinte años de su muerte, acaecida en 1993. “No tenía sentido del miedo en una época en la que te quitaban los dientes sin anestesia en las comisarías. Era una persona coherente y de un valor extraordinario”, dijo de su tío, por el que entró en las Juventudes Comunistas.
De fuerte convicción, militó en el Partido Comunista y formó parte de Podemos
El historiador Sergio Millares señalaba ayer que su tío “jugo un papel fundamental” en su formación ideológica y su trayectoria política. “Se consideraba un sucesor de sus ideas e ideales”, apuntaba Millares, quien calificó a ambos como “incombustibles, aunque indicó que mientras Fernando era “todo acción y emoción”, Joaquín “era más teórico y político”.
Sergio Millares, que militó con Quino en el Partido Comunista de España y posteriormente en Izquierda Unida, en la Unión del Pueblo Canario y en Podemos, confesó que para él fue “uno de mis padres políticos, quien me introdujo en el marxismo-leninismo; había leído mucho sobre Marx, Lenin”. Una faceta lectora que no le abandonó nunca a Quino, que también le gustó dar su opinión sobre la realidad social en la prensa. Precisamente, su hermano Salvador Sagaseta fue periodista de LA PROVINCIA/DLP, donde también colaboro él.
“Fue un maestro para una generación que quería acabar con el Franquismo y con la línea histórica y heroica del comunismo”, continúo el historiador, quien señaló que Joaquín Sagaseta tenía la capacidad de ir recogiendo a toda la militancia “a la izquierda del partido socialista” que había roto con el Partido Comunista por defender su transformación e ilusionarla en un nuevo proyecto como Podemos. “Era un prosoviético-ortodoxo; con una gran firmeza ideológica y con una extraordinaria habilidad para la táctica”, añadió Millares, que lamentó su muerte.
El abogado Diego León Socorro, profundamente emocionado por su fallecimiento, señaló que Joaquín Sagaseta “está considerado como el mejor abogado laboralista que hay en Canarias no solo por su ingenio, sino como jurista. Era una auténtica bestia”. Y resaltó de él su “magnifica oratoria y su vehemencia” en los juicios.
Desde hace décadas estaba considerado como el mejor letrado en su especialidad
León manifestó que Joaquín Sagaseta ponía pasión en su trabajo y que en cada expediente que caía en sus manos “se dejó la vida”. Entre los colectivos de trabajadores a los que defendió figuraron los guagüeros y los empleados de la limpieza; entre otros. “Era un genio local, una auténtica maravilla de persona”, subrayó.
En la misma línea se refirió también el abogado de Comisiones Obreras Isaías González Gordillo: “Joaquín Sagaseta era un excelente profesional, comprometido con el obrero, que se ha muerto con lo puesto. No trabajaba por dinero, sino por sus ideas”.
González, que trabajó con el desde 2003 hasta que le dio un ictus en 2016; y que también sentía su perdida, manifestó que era un hombre “muy vital, que contagiaba alegría” y que era muy abierto con los letrados que comenzaban en la profesión, tanto es así que no le importaba que le “fusilaran” algún texto si eso les sacaba de apuro. “Ir a un juicio de él era como ir a ver una película divertidisima”, subrayó sobre elocuencia.
El abogado aseguró que Quino estaba muy comprometido con su profesión, no solo en el aspecto jurídico, sino por el impacto social que tenían las sentencias en los trabajadores. “Era muy ocurrente, decía que el derecho laboral era como una cárcel con barrotes y que había que buscar rendijas para escapar de él”, manifestó. E hizo hincapié en su humanidad.
El sindicalista Feluco Marrero, ex trabajador de Guaguas Municipales y que fue presidente del comité de empresa durante los años 90, aseguró que Joaquín Sagaseta “es parte de Guaguas Municipales” ya que gracias a él se ganaron muchos pleitos con el Ayuntamiento, durante la etapa de José Manuel Soria. “Era un todo terreno para los guagüeros, no solo porque ganamos muchos despidos con él y otros conflictos laborales, sino porque también nos asesoró a la hora de negociar los convenios y nos tenía al tanto de cualquier ley sobre transporte que saliera por el Gobierno”.
Ha defendido a colectivos como los Guagüeros o el personal de limpieza
Aquellos años unieron a Feluco con Quino. “Era una persona maravillosa, no tenía hora para nosotros; su casa estaba abierta las 24 horas, le llamabas y te atendía. Siempre nos tranquilizaba”, señaló el guagüero, quien también enfatizó lo buena persona que era. “Para mí era como un hermano”, señaló ayer, mientras manifestó su tristeza por su muerte.
El alcalde Augusto Hidalgo también tuvo palabras de reconocimiento hacía Quino Sagaseta, con quien militó en Izquierda Unida, tanto en lo profesional como en lo personal. “Era un hombre con una marcada ideología de izquierda cuya impronta dejaba en su quehacer profesional. Compaginaba la militancia política con su actividad de letrado; que era indisociable ni siquiera en la sala”, manifestó Hidalgo, cuyo padre, también abogado, compartió bufete con el tío de Quino en los años 60, donde defendieron a aparceros y portuarios. “Joaquín pertenecía a esa segunda generación de abogados laboralistas con marcado carácter de izquierda, después de una primera generación de la Transición, en la que estuvo mi propio padre”, añadió.
Él también elogió sus escritor periodísticos y sus intervenciones en los juzgados de lo social en los que “disparó por la defensa de los derechos de los trabajadores allí donde se encontraran desde su perspectiva ideológica”. Y lamentó lo joven que se había muerto.
Emilio Díaz de Miranda, un referente de la izquierda comunista canaria, aunque mayor que Quino, destacó su humanidad “independientemente de sus ideas políticas” con las que no siempre coincidió pese a ser de izquierdas. Y recordando la conocida poesía del escritor alemán Bertolt Brecht señaló que Joaquín Sagaseta “pertenecía a la menguada fila de los imprescindibles”.
LAS FRASES
Sergio Millares. Historiador:
- “Era un sucesor de las ideas e ideales de su tío el abogado Fernando Sagaseta; ambos eran incombustibles”
- “Era un prosoviético-ortodoxo, con gran firmeza ideológica y extraordinaria hábilidad para la táctica”
Feluco Marrero. Sindicalista y guagüero:
- “Es parte de Guaguas Municipales, gracias a él se ganaron muchos pleitos y despidos en la etapa del alcalde Soria”
- “Era una persona maravillosa. Le llamábamos y nos atendía a cualquier hora; nos tranquilizaba siempre”
Augusto Hidalgo. Alcalde de la ciudad:
- “Compaginaba la militancia política con su actividad de letrado, que era indisoluble ni siquiera en la sala”
- “Pertenecía a esa segunda generación de abogados laboralistas con marcado carácter de izquierda”
