El mar ha salido a flote en la calle Venegas, en Las Palmas de Gran Canaria. El agua anegó parcialmente el pasado viernes parte de los trabajos de una promoción de viviendas tras el fallo en una bomba de achique que ya ha sido reparada. Desde la constructora Acosta Matos han aclarado que se trató de un "momento puntual" y que es una situación "completamente normal" al trabajar bajo el nivel freático en la zona ganada al mar de la ciudad; de hecho, este lunes la actividad en dicho solar transcurría con total normalidad.
Según han informado desde la constructora una de las cuatro bombas de achique tuvo un fallo el pasado viernes, por lo que el nivel del agua subió, aunque sin cubrir del todo la obra. Este lunes, tras haber reparado la avería, ya no había ningún tipo de contratiempo. La promotora resalta que esto no ha provocado ningún retraso en el proyecto ni problemas a terceros y que la obra sigue ya su curso con normalidad con vistas a finalizar el baso de cimentación. El futuro edificio de Acosta Matos en Venegas tendrá cinco alturas más planta baja con 40 viviendas, cinco locales comerciales, garajes y trasteros.
Una imagen como la vista el pasado viernes se repite con cierta frecuencia en solares en obras en la zona ganada al mar de la capital grancanaria. Ocurrió, por ejemplo, hace un año en la calle Doctor Juan José Megías, en Ciudad Jardín, aunque en aquella ocasión la piscina que se formó en la parcela permaneció allí más tiempo. Para evitar este tipo de situaciones la mayoría de los edificios e infraestructuras situados en el frente marítimo de Las Palmas de Gran Canaria cuenta con bombas de achique. Sin ir muy lejos, el aparcamiento subterráneo de Venegas, anexo al edificio en obras de Acosta Matos, cuenta con hasta seis bombas de achique que trabajan a destajo.
