La empresa municipal Sagulpa iniciará en los próximos meses la construcción de un nuevo aparcamiento en la calle Juan de Quesada, en la zona de Vegueta, en un espacio cercano al Rectorado de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Se trata de una infraestructura modular y sostenible que albergará 234 plazas de estacionamiento, de las cuales cuatro se reservarán para personas con movilidad reducida, lo que supone la ampliación en casi 200 más respecto a las existentes en esta superficie, según explicó ayer la compañía en un comunicado.

El proyecto, que supone una inversión de 2.533.539 euros, incluye la demolición de la edificación existente y la instalación de placas fotovoltaicas en la cubierta del aparcamiento para que sea 100% autosuficiente. Estas láminas solares permitirán la generación y almacenamiento de energía limpia, de manera que podrán suministrar no sólo al propio aparcamiento, sino la posibilidad también de abastecer a otros centros públicos cercanos. Sin olvidar la instalación de, al menos, ocho puntos de recarga para vehículos eléctricos, según detalló Sagulpa.

Esta instalación, compuesta por 560 módulos fotovoltaicos, podrá generar 351.000 KWh al año, lo que supondrá un ahorro anual de 42.000 euros y evitará la emisión de 271,14 toneladas de CO2 a la atmósfera. La inversión final de estas placas solares rondará los 270.000 euros.

La ubicación del nuevo aparcamiento, en el barranco Guiniguada de la capital grancanaria y alejado del centro urbano, tiene un claro objetivo disuasorio. De esta manera, se han tenido en cuenta los flujos de tráfico, los niveles de congestión, así como la demanda de plazas de estacionamiento, para disminuir las aglomeraciones en las entradas a la ciudad, sobre todo en las horas punta.

No se trata de la única actuación en este distrito, ya que “a este aparcamiento hay que sumar los que se tiene previsto construir en el cono sur, que están vinculados a la Metroguagua y que pretenden fomentar el uso de este nuevo modo de transporte entre los ciudadanos que vienen a la capital desde el sur”, según señaló José Eduardo Ramírez, concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

La fachada exterior simulará un jardín vertical que se integrará en el entorno

“Los aparcamientos disuasorios o intermodales son claves para la estrategia de movilidad sostenible que se está desarrollando desde esta Concejalía”, añadió Ramírez sobre este asunto. Estas infraestructuras “permiten que los vehículos que vengan de otros municipios aparquen a las afueras y se muevan por la ciudad a través de modos más sostenibles como la guagua, el taxi, la bici, la patineta o incluso caminando”.

Para facilitar esa conexión con la ciudad, y tras la municipalización de ese tramo de la conocida como carretera del centro, este nuevo aparcamiento se conectará con el carril bici y se instalará una estación de sistema público de bicicleta compartida con Sítycleta.

Este proyecto ha dedicado especial atención y cuidado a su integración en el entorno. Es una zona en la que predominan las viviendas unifamiliares y algunos edificios administrativos pertenecientes a la universidad. Para minimizar el impacto visual hacia la calle Juan de Quesada, en la fachada más larga y visible del nuevo aparcamiento está prevista la ejecución de un jardín vertical. Con esta actuación se pretende dar continuidad al verde que proporciona el arbolado de esta zona.

Otro aspecto destacable en cuanto a la sostenibilidad de esta nueva estructura será la instalación de un depósito enterrado que permita la recogida de agua procedente de las lluvias para el riego del jardín vertical, así como de los parterres que se dispongan en la planta baja. También se prevé que pueda reutilizarse, con el tratamiento adecuado, el agua de los lavabos de los aseos.