Luis Delgado Lállemand, primer director de los astilleros Repnaval y ex presidente de la Asociación de Reparaciones Navales del Puerto de Las Palmas, ha fallecido este viernes. Aunque nació en Cádiz, pasó gran parte de su vida vinculado a la capital grancanaria, donde llegó a finales de la década de 1960 tras lograr una plaza en la Escuela de Peritos Industriales. Vivió en primera persona el traslado de los antiguos astilleros y llegó a ser catedrático de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, además de autor de varias obras de referencia en su campo.
Fue en septiembre de 1969 cuando Delgado Lállemand tuvo su primer contacto con el Puerto en el que pasaría gran parte de su vida y que cada día, incluso ya jubilado, continuaba oteando desde su casa. Había llegado a Las Palmas de Gran Canaria tras obtener el segundo puesto entre 169 opositores que se presentaban a cinco plazas y pronto comenzó a compaginar la enseñanza con la práctica de su profesión.
Ese mismo año fue contratado como director de los varaderos de la compañía Depósitos de Carbones de Tenerife, la antigua casa Woermann. También estuvo a cargo de dos de los otros varaderos del istmo, que eran propiedad de Miller y Cía. Por un lado, el de la Compañía Carbonera de Las Palmas en Rosarito y por otro, el de Cory en la esquina con Albareda.
Mudanza a Santa Catalina
Las antiguos instalaciones navales tuvieron que abandonar el istmo en esa misma época -por entonces arrancaba la construcción de la Avenida Marítima y los actuales muelles del Refugio y Sanapú- y se trasladaron a la zona entre Santa Catalina y la Base Naval a través de una sociedad de nueva creación denominada Repnaval. Delgado Lállemand comandó la mudanza, que no resultó sencilla, ya que el varadero estaba en Santa Catalina, pero los talleres aún permanecían en el istmo, según él mismo explicó en una entrevista concedida a LA PROVINCIA en 1983.
Esta no fue la única mudanza que tuvo que acometer. La ejecución de los últimos tramos de la Avenida Marítima obligó a cambiar de sitio una vez más los varaderos. Repnaval se trasladó a finales de la década de 1980 a sus instalaciones actuales, ubicadas en el arranque del muelle Reina Sofía. Delgado Lallemand continuó al frente durante algún tiempo cuando la empresa pasó a formar parte del grupo Zamakona. Además, durante buena parte de esa década asumió cargos de representación del sector al asumir la presidencia de la Asociación de Reparaciones Navales integrada en la Federación de la PYME del Sector del Metal de Las Palmas (Femepa).
Su trabajo a pie de muelle se completaba con el que realizaba en las aulas. Delgado Lállemand vivió la creación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, institución de la que llegó a ser catedrático de Cálculo y Construcción de Maquinaria. Su huella académica también quedó plasmada en los manuales de las asignaturas que impartía, pero sobre todo en una obra de referencia en las enseñanzas marítimas, el Diccionario Enciclopédico Marítimo en sus dos versiones, de español a inglés y viceversa. Los volúmenes, presentados en la Autoridad Portuaria de Las Palmas una década atrás, incluyen 80.000 términos en los dos idiomas.
La dilatada trayectoria de Lállemand le valió el reconocimiento de la comunidad portuaria hace siete años. En 2014, la Fundación Puertos de Las Palmas le otorgó el premio Puertos de Las Palmas a la vida en el entorno portuario durante un acto en el que se destacó que “durante su vida profesional, la empresa reparó un total de 8.964 barcos en grada”.
