Un último lote de 56.280 kilogramos de gofio ha salido este viernes desde Gran Canaria rumbo a los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, en Argelia, donde la situación de necesidad se ve incrementada ante la falta de financiación que está recibiendo el Programa Mundial de Alimentos de la ONU en su delegación en el país norteafricano. En total, en el último año, el Cabildo insular, en cooperación con la Confederación Canaria de Empresarios, ha llevado hasta el pueblo saharaui en el exilio más de 1.200 toneladas de este producto típico canario.
Según el PMA, estos tres contenedores de gofio lograrán combatir la hambruna por la que están atravesando los saharauis refugiados de Tinduf, donde a la situación sanitaria mundial se le ha sumado en los últimos meses un recrudecimiento en el conflicto bélico entre Sáhara Occidental y Marruecos, que vulneró en octubre un alto el fuego de 29 años.
La representante del Programa de Naciones Unidas en Canarias, Ivelina Nunes, ha explicado que la llegada de gofio a los campamentos "representa una importante fuente de nutrientes" para los refugiados, ayudando a combatir "la malnutrición y la anemia especial".
En concreto, las 1.200 toneladas de gofio del Plan insular de Cooperación Internacional fueron destinadas a alimentar a 40.000 niños de 82 escuelas y jardines de infancia de la población saharaui en el exilio. Nunes ha apuntado que el menú en el que se contiene esta harina de millo tostado, les aporta 350 calorías diarias, 75 más de las que se estaban repartiendo hasta ahora, y espera que en 2021 esta ayuda sirva también para apoyar el resto de la asistencia alimentaria general.
Por su parte, el representante del Frente Polisario para España, Abdulah Arabi, ha agradecido el esfuerzo y solidaridad con el pueblo saharaui de los empresarios canarios y de sus instituciones. "Para nosotros, también es un producto que consolida nuestra vinculación con Canarias y su gente, y es que sentimos el gofio como algo que forma parte de nuestra idiosincrasia y nuestra alimentación", ha destacado.
El consejero insular de Solidaridad Internacional, Carmelo Ramírez, ha comentado que el envío de gofio a Tinduf no solo supone una muestra de compromiso y solidaridad con el pueblo saharaui, sino que también contribuye a mantener la actividad en las empresas canarias, que se han visto muy afectadas por la pandemia de Covid-19, y los puestos de trabajo de sus empleados.
