La concejalía de Urbanismo repara uno de los muros exteriores del parque deportivo de San Nicolás con carácter de urgencia. Las instalaciones, inauguradas en agosto de 2019, todavía están en fase de garantía, por lo que es la constructora adjudicataria la encargada de acometer los trabajos de mejora, según explican fuentes municipales. Los vecinos llevaban desde principios del año pasado viendo cómo las grietas proliferaban en el lado sur de la cancha multiusos, donde niños y jóvenes juegan a fútbol y baloncesto, hasta tal punto que operarios del Ayuntamiento colocaron vallas.
Las obras de reparación, que se prolongarán previsiblemente hasta la próxima semana, han consistido en desmontar las canastas y báculos del parque, demoler el último tramo de cancha pegado al muro -donde fundamentalmente se produjeron las grietas-, y sacar el relleno de tierra. Posteriormente, los operarios procederán a rehacer todo este proceso con tierra nueva y un nuevo pavimento en esta parte, para finalmente volver a colocar las canastas.
El Ayuntamiento no devolverá una de las fianzas a la empresa constructora por los desperfectos
Desde Urbanismo explican que estos trabajos han salido por la vía de Urgencia. Operarios municipales y vecinos comenzaron a detector grietas en la zona de diversa consideración a principios del año pasado, cuando el parque apenas llevaba inaugurado seis meses. En algunos puntos las ranuras tenían más de dos centímetros de ancho, con el consiguiente peligro que eso conllevaba, al ser esta una zona frecuentada por niños y jóvenes del barrio.
Fuentes de Urbanismo señalan que no devolverán una de las fianzas a la constructora adjudicataria, a modo de penalización por el deficiente resultado en este área deportiva. En total, el proyecto supuso una inversión por parte del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria de 1,78 millones de euros repartidos en dos fases de ejecución a cargo del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).
La primera fase, a cargo de Acciona y con una inversión de 779.000 euros, consistió en crear una escalera y rampas para salvar el desnivel de 14 metros desde la calle Bernardino Correa Viera y los muros de contención. La segunda, en este caso a manos de Satocan por 911.000 euros, permitió dotar de equipamiento al área deportiva y las zonas verdes del parque.
Los terrenos en los que se asienta el parque de San Nicolás son antiguos bancales agrícolas que se disponían entre la calle Álamo y la prolongación de Primero de Mayo; es más, para el skatepark aprovecharon la base de un viejo estanque que se utilizaba para el riego de las plantaciones. De ahí la poca consistencia incial de un terreno que ha tenido que ser moldeado y rellenado hasta adaptarse a las nuevas instalaciones.
El parque fue diseñado en colaboración con la Fundación Farrah y los niños del barrio
El parque tiene unas dimensiones de 3.000 metros cuadrados. Para su diseño, el Ayuntamiento abrió un proceso de participación y logró la colaboración de la Fundación Farrah y 160 menores del Risco de San Nicolás, además de otros vecinos del barrio, para dar respuesta así a la falta de equipamientos en la zona.
El espacio multifuncional resultante del proyecto cuenta con una pista de deportiva de 1.400 metros, con canastas de baloncestos y porterías de fútbol. También hay un área infantil y un skatepark. El espacio cuenta además con una escalinata hasta la prolongación de Primero de Mayo, una rampa y una grada.
