La Guía Repsol, referencia en el ámbito de los viajes, la gastronomía o las rutas, dedica en mayo un reportaje al renovado Hotel Santa Catalina. Bajo el titular El legado del esplendor británico, la publicación repasa la historia y el presente de Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel: un establecimiento cuya gestión se adjudicó a Barceló.

El grupo realizó un esfuerzo para sufragar la rehabilitación del inmueble, una de las joyas patrimoniales de Las Palmas de Gran Canaria. Y emblema turístico de la ciudad, tal como recalca la Guía Repsol, que apunta que «su aspecto actual es heredero directo del primer gran reseteo acometido en 1952 por Miguel Martín-Fernández de la Torre, arquitecto ecléctico que rehizo el edificio según patrones del neocanarismo»

En un reportaje gráfico cuyo texto firma Igor Cubillo, con fotografías de Rocío Eslava, se destaca que «el alojamiento no ha perdido ni la grandeza de finales del siglo XIX, cuando abrió sus puertas por primera vez, ni el esplendor artístico de mediados del XX, cuando experimentó su primera resurrección».

El artículo repasa la historia del hotel, en un momento de importante tránsito marítimo con las islas británicas. El reportaje describe la colección de arte del hotel, en la que se cuentan cuatro espirales de Martín Chirino y óleos del tinerfeño Manuel Martín González. La guía recuerda la reapertura del establecimiento, en febrero de 2020, tras la finalización de las obras e invertir 28 millones. El reportaje también describe cómo el hotel se levanta «arropado por la vegetación», en pleno Parque Doramas, «concebido por Nicolau Maria Rubió i Tudurí, que lo rodea e integra».