El gobierno municipal acabó el primer año de la pandemia con 132 millones sin gastar, pese a la eliminación del techo de gasto, debido a la baja ejecución del presupuesto. La incapacidad de gastar del tripartito no sólo afectó a las inversiones, de las que menos de la mitad se quedaron sin ejecutar, sino incluso al gasto social, que dejó sin gastar 11,5 millones en plena escalada de solicitudes de ayuda por la emergencia sanitaria. Por otro lado, el retraso en el pago a proveedores de obras y servicios le pasó factura a las arcas de la ciudad, que tuvo que pagar casi ocho millones en intereses de demora, de los cuales, 2,4 millones corresponden a la dilación de la empresa municipal Geursa. Pese a que el gobierno local anunció a mitad de 2020 un plan extraordinario de inversiones de más de 100 millones de euros, capaz de crear 1.800 puestos de trabajo, lo cierto es que sólo se gastaron en obras 53,8 millones, el 45% de los 118,5 presupuestados. El dinero que tiene el consistorio en los bancos bate todos los récords al alcanzar los 315 millones en remanentes de tesorería.
Mientras la oposición consideró «inaceptable» una ejecución tan baja del gasto del presupuesto de 2020, que se situó en el 72%, el gobierno resaltó que el nivel de gasto aumentó con respecto a 2019, pese a las dificultades que entrañó la aparición de la pandemia y los meses de confinamiento.
El coordinador general de Economía y Hacienda, Antonio Ramón Balmaseda, resaltó el esfuerzo de los empleados municipales para maniobrar cuando se desató el estado de alarma, apenas cuatro días después de la entrada en vigor del presupuesto. Así, destacó que se ejecutó el 89,67% de los ingresos, menos que el año anterior, reconoció, pero lo justificó por la suspensión de cánones y tasas, el retraso en el cobro de los impuestos y la reducción en la recaudación de impuestos indirectos, como el IBI, y las multas de tráfico. «El Ayuntamiento», subrayó, «estuvo a la altura», pese a la que estaba cayendo.
En cuanto a los gastos, sostuvo que a pesar de ser un «año peculiar» se alcanzó el 72%, «un grado de ejecución importante. Se demuestra que cada año se ejecuta más. Incluso las inversiones elevaron su grado de ejecución, claro que no había que hacer mucho esfuerzo para superar el balance de 2019. Así, 2020 concluyó con 39 millones pendientes de pago, aunque según Balmaseda en estos momentos «sólo» quedan pendientes 457.418 euros.
El gobierno destaca el aumento en el gasto y la oposición critica la incapacidad para gestionar
Que «alguien coja las riendas de este Ayuntamiento», reclamó David Suárez, de CC-UxGC, quien consideró inaceptable que la cuenta 403 de deuda comercial pendiente de reconocer, tenga en estos momentos 77 millones pendientes de pago. «Este Ayuntamiento recauda mal, ejecuta peor y ha convertido en algo normal pagar un montón de millones en intereses de demora por pagar tarde», apostilló Francis Candil, portavoz de CC-UxGC.
Por su parte, la portavoz de Cs, Lidia Cáceres, pidió rigor y responsabilidad en la gestión . «Tenemos una administración que no está a la altura; donde único se ha gastado más ha sido en publicidad y propaganda». Cáceres advirtió, en relación con las 106 actuaciones económicas que se aprobaron en 2020 en junta de gobierno, sin la previa fiscalización de la Intervención, de la gravedad de «tener 18 millones pendientes de pago porque los contratos están en nulidad y 77 millones en facturas en un cajón». Criticó que el área de Solidaridad ejecutó un 0%
Finalmente, Víctor Moreno, del PP, calificó de «paupérrima» la ejecución . «Anunciaron un plan de inversión extra de 100 millones y ni siquiera ejecutaron 65 millones de los 118,5 que estaban presupuestados, justo en el año que más se necesitaba, en pleno año de pandemia y confinamiento. Si no son capaces de ejecutar el presupuesto ordinario, qué podemos esperar de lo que harán con los fondos Next Generation». «Nos parece una tomadura de pelo», concluyó, «que ningún concejal del gobierno dé una explicación por esta pésima gestión».
El Ayuntamiento ha incumplido este año de nuevo con los plazos para presentar la liquidación del presupuesto a la Audiencia de Cuentas, que realizó en marzo pasado un requerimiento conminatorio al consistorio para que remitiera las cuentas municipales de 2020.
Este incumplimiento, recordó el viceportavoz del PP, Ángel Sabroso, implica una penalización al Ayuntamiento en forma de retención del 2% en todas las subvenciones que la Comunidad Autónoma remita al Ayuntamiento. «Ahora tendremos que requerirle a la Comunidad Autónoma que nos devuelva ese 2%», lo que supone cargar con más trámites burocráticos a una plantilla que está desbordada por la falta de personal. Por otro lado, la Agencia Local de la Energía (ALGE) terminó 2020 sin gastar más del 80% de su presupuesto de 812.000 euros. «Cierren ya la ALGE y dediquen ese presupuesto a Medio Ambiente», reclamó el edil David Suárez.
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Los vecinos de Almatriche Bajo volvieron a concentrarse ayer para exigir la colocación de aceras en la GC-310 y la conexión con Siete Palmas. El gobierno rechazó ayer una moción presentada por CC-UxGC para instar al Cabildo a ceder la vía.
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Jonathan Vega, uno de los participantes en el proceso selectivo de guagüeros pidió al alcalde que intervenga ante las más de 300 reclamaciones presentadas.
