Cara y cruz para dos empresas que forman parte de la corporación marítima Boluda en la última reunión del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Las Palmas. El órgano de dirección, reunido ayer en Las Palmas de Gran Canaria, rechazó la petición efectuada por La Luz Terminal de Contenedores para ampliar su superficie concesional en el Puerto de La Luz con una zona de lámina de agua, pero dio el visto bueno al proyecto de Remolcadores y Barcazas de Las Palmas para construir una base de buques remolcadores en el muelle de Cambulloneros en la que sus buques podrán apagar los motores y conectarse a la red eléctrica.
El rechazo a la propuesta de Boluda está fundamentado en la negativa de la Autoridad Portuaria a conceder lámina de agua en el Puerto de Las Palmas, con la única excepción del sector de reparaciones navales. El trasiego de buques es constante en el recinto de la capital grancanaria y la línea de atraque, escasa. «Si un barco necesita una escala durante seis horas y no hay previsión de escala en una terminal, no podemos decir que no», justificó el presidente de la Autoridad Portuaria, Luis Ibarra.
Remolcadores
La propuesta de Remolcadores y Barcazas de Las Palmas corrió mejor suerte. La compañía, única prestataria que ofrece este servicio portuario en la actualidad, había solicitado a la Autoridad Portuaria 516 metros cuadrados en el muelle de Cambulloneros para levantar una base para sus buques remolcadores.
Uno de los objetivos de Boluda con esta base es la conexión de los remolcadores a la red eléctrica mientras estén atracados, para reducir las emisiones contaminantes procedentes del Puerto. La compañía también mejorará su ubicación en el Puerto, al trasladarse desde la dársena interior -sus buques amarran en la actualidad en Santa Catalina en función del nivel de ocupación- hasta la dársena exterior, más cerca de la dársena de África y las dos zonas de fondeo.