Zamakona quiere mejorar la capacidad de varada del astillero Repnaval, en el Puerto de La Luz, y dotarlo de un sistema de suministro eléctrico a buques. El grupo naval, que cumplirá 50 años en 2022, ha solicitado a la Autoridad Portuaria de Las Palmas una ampliación de superficie y una prórroga del plazo de concesión con varios objetivos. Por un lado podrá realizar reparaciones o mantenimientos en barcos más anchos que en la actualidad. Por otro, reducirá la huella de carbono al facilitar el apagado de los motores de las naves.
La atarazana aspira a ocupar 36.747 metros cuadrados de terrenos y lámina de agua
La renovación del varadero se centrará en uno de sus carros de varada, el número cinco. Hasta ahora era el de menores dimensiones y capacidad de las instalaciones, pero tras la mejora podrá recibir barcos de mayor eslora -hasta 145 metros- y operar de manera simultánea con el carro contiguo, lo que amplía el mercado de clientes potenciales. De hecho, Repnaval podrá atender buques de mayor manga al combinar ambas infraestructuras.
La mejora de la eficiencia energética es el segundo pilar de la solicitud presentada a finales del mes de agosto ante la Autoridad Portuaria. El tramo de 120 metros del muelle Reina Sofía utilizado por Repnaval para realizar reparaciones a flote contará con un sistema de conexión de buques a la red eléctrica, lo que les permitirá apagar sus motores. Para ello será necesario adaptar la instalación eléctrica de media y baja tensión.
Doble petición
El doble proyecto de Zamakona se materializa en sendas peticiones ante la Autoridad Portuaria. En primer lugar, ha propuesto una ampliación de la concesión en 7.216 metros cuadrados de zonas de maniobra y 21.701 metros cuadrados de lámina de agua. En total, el astillero dispondrá de 36.747 metros cuadrados -los terrenos actuales ocupan 7.820,89 metros cuadrados- si los Puertos de Las Palmas aprueban su solicitud. En segundo lugar, ha pedido prorrogar el plazo concesional en función del proyecto de instalación eléctrica para el suministro a buques, lo que además conlleva una ampliación del objeto concesional para incluir este nuevo servicio.
Al margen de este proyecto, Zamakona trabaja en estos momentos en la mejora de la eficiencia energética de sus operativas en el Puerto de Las Palmas. El grupo sopesa colocar en su concesión una instalación fotovoltaica destinada al autoconsumo, lo que le permitirá reducir sensiblemente su huella.
La mejora de las instalaciones permitirá a Repnaval continuar en unas instalaciones inauguradas en la década de 1990, tras abandonar los antiguos varaderos de Santa Catalina. En su cartera de clientes hay flotas pesqueras -la japonesa es una de las más habituales-, militares -es uno de los adjudicatarios de las varadas de los buques de acción marítima de la Armada- o naves civiles especializadas, como el barco hospital Esperanza del Mar del Instituto Social de la Marina.
