El cocinero grancanario Fabio Santana Sosa falleció este miércoles en Las Palmas de Gran Canaria a los 40 años de edad.

Esta repentina e inesperada pérdida de este profesional de las cocinas, natural de Telde y afincado en la capital grancanaria, ha sorprendido de gran manera a su familia, amigos y a todos los profesionales culinarios que lo conocían o habían trabajado con él. Era muy conocido por los profesionales y el público, sobre todo por los medios de comunicación, en la Isla y en al Archipiélago.

«Me he quedado paralizado, no lo puedo creer», decía anoche otro cocinero que prefirió quedar en el anonimato. «Estoy impactada», aseguró a este periódico una cocinera que acababa de llegar de la Península y que tuvo que hacer varias llamadas para que le confirmasen «la triste noticia» que le habían anunciado.

Fabio Santana, padre de un hijo menor de edad, fue para muchos, a pesar de su juventud, «un referente» y «un auténtico revolucionario» al incluir ciertas tendencias culinarias, y siempre con proyectos de rescate. Había trabajado más de veinte años entre los fogones. «Es un currante, además de muy crítico con su trabajo», comentó la cocinera.

Santana Sosa había trabajado en numerosos restaurantes, como La Butaca, en La Casa Montesdeoca, en el Gabinete Literario y actualmente lo hacía en el restaurante del Hotel AC Gran Canaria. Además, Fabio Santana se había sumado a distintos proyectos, como Gran Canaria Me Gusta, en la que abanderaba la cocina de la Isla.

A la hora de definirlo, distintos familiares y amigos recurrían anoche a numerosos adjetivos y comentarios: «Era peculiar; amigos de sus amigos; currante; crítico con lo que hacía; y siempre vivía la vida a tope y quería que todos hicieran lo mismo».

«Fabio era divertido, cariñoso, generoso y único; un grandísimo profesional, creativo y con muchísimo talento. Su cabeza le ganó la batalla», añadieron las mismas personas, que lamentaron esta pérdida de Fabio Santana Sosa.

Descanse en paz.