Después de concluir el mes de prueba, Guaguas Municipales se encuentra analizando los datos que ha recabado de los nuevos métodos de pago en los vehículos de la compañía. Los primeros datos apuntan que un 20% del total de cobros directos de los viajes en la línea 12 -la única en la que se instalaron las nuevas máquinas validadoras- se realizaron con tarjeta bancaria. La implantación de estas opciones, según fuentes de la empresa pública de transporte, ha ido «más despacio» de lo esperado, sobre todo en el uso de la tarjeta, pero la idea de extenderlo a toda la flota se mantiene.
De esta forma, la instauración continuará en las próximas semanas «despacio y progresivo», lo que permitirá un «aprendizaje lento pero que esté ajustado», según indicaron las fuentes consultadas por este periódico. Hasta ahora, no han podido seguir expandiendo el sistema porque no han llegado a la compañía todos los aparatos necesarios todavía. En lo que sí han avanzado en este tiempo es en la preinstalación de todo el cableado interno de los vehículos, y solo faltarían tres guaguas para concluir con la práctica totalidad de la flota municipal, que se encuentran ya en talleres externos.
De los datos de los que dispone la compañía hasta la fecha, la utilización de la tarjeta bancaria se ha ido incrementando conforme pasaban las semanas hasta llegar a unos 200 usos diarios en la línea 12, que suele tener unos mil pagos directos diarios, estos son los que se abonan directamente al conductor al entrar en el vehículo. Ello supone un 20% del total. Mientras, el pago móvil mediante el lector QR está siendo utilizado en una horquilla de entre 20 y 40 veces al día, sobre todo porque mucha gente utiliza en la actualidad los bonos residente o Wawa joven.
«El compromiso es extenderlo, si bien habrá que analizar primero dónde están los errores y demás, y una vez analizados se llevará al resto de la flota», reconocieron desde Guaguas. Lo que sí han podido entrever en estas semanas es que los nuevos métodos de pago son más utilizados por visitantes que solo están de paso por la capital que por la propia población local, en línea con la cada vez mayor implantación de los bonos para residentes.
