Los vecinos de Arenales dicen basta. "Se vive inseguridad de día y de noche. Se acentúa mucho más a partir de las ocho de la tarde, que da miedo salir a la calle o ir a comprar el pan porque hay problemas todos los días”, asegura una vecina del barrio capitalino a los micrófonos de COPE Canarias. 

Ana lleva 16 años viviendo en esa zona. Esto es un nombre ficticio ya que asegura que “no podemos dar la cara, ni manifestarnos porque nos pueden clavar un cuchillo”. “Nadie se hace una idea de lo que llevan años aguantando y viviendo”. Los vecinos están hartos de la inseguridad que hay en esa zona de la capital, con prostitución, drogadictos, robos a plena luz del día en viviendas y comercios y aseguran que por mucho que lo hayan denunciando, nadie ha hecho nada por remediarlo.

“Hay ruidos las 24 horas del día, ya que hay un constante trasiego de gente que sale de los prostíbulos, de gente que va a consumir o a comprar droga. Toda esta situación se vivía, pero después de la pandemia ha empeorado mucho más”.

Además, asegura que “los niños lloran porque no pueden dormir, tienen miedo por lo que se encuentran en las calles. Hay prostitutas callejeras en todas las esquinas y cada vez se están extendiendo más y llegan hasta el edificio de la Casa África. Los niños no es que no quieran ir al colegio sino que tienen miedo al ir por lo que se encuentran en la calle”.

“Los mayores y los niños no quieren salir de casa por el miedo que tienen. Hacemos un grito desesperado y que nos hagan caso de una vez”, añade.

“Hay bastantes tirones de bolsos a plena luz del día en la calle Tomás Morales y los negocios del barrio están muy afectados por estos robos: fruterías, quioscos de prensa, peluquería...”, asegura. 

"No solo ocurren en los comercios de la zona, sino también en viviendas.” Hay robos porque escalan por las fachadas y se meten por las azoteas de los edificios. Esto es insostenible”, prosigue.

En Arenales existen tres colegios cerca de los prostíbulos y otros tres centros escolares, institutos en la calle Tomás Morales, que se encuentra relativa,ente cerca del barrio. La vecina no entiende que sigan existiendo estos lugares a pesar de que haya tantos menores cerca.

La solución a su problema es “retirar la prostitución de la zona, expropiar los terrenos y urbanizarlos, porque socialmente han avanzado todos los barrios de Las Palmas de Gran Canaria, menos este”.

"Según los partidos políticos que están en la oposición, podría haberla si se lleva un plan de urbanismo diferente. El plan consiste en comprar, o construir o hacer edificios públicos como: una comisaría, guardería pública, que no hay en Arenales o incluso una residencia de mayores. Pero ya les digo, lo que es el gobierno municipal, todavía no nos ha dado ninguna solución”, concluye.