Canarias ha sido y es tierra de cultivos. Su privilegiada situación geográfica, su bondadoso clima y el esfuerzo de los hombres y mujeres de estas islas son hoy el fruto de un paisaje de terrenos trabajados. Kilómetros de extensiones de plátanos, viña, papas, tomates y tantos otros productos de nuestro territorio hacen de Canarias un lugar excepcional, donde la agricultura, la ganadería y la pesca siguen siendo uno de sus mayores tesoros.
Hoy se celebra en varias partes del mundo el Día Mundial de la Agricultura y en Canarias aprovechamos esta efeméride para fijar la mirada en nuestro sector primario y en nuestros valiosos productos.
La historia de las Islas se ha escrito con el esfuerzo y sacrificio de quienes con sus manos han trabajado el campo y el mar durante numerosas generaciones. Una actividad esencial, no solo para la economía del Archipiélago, sino para su identidad y cultura, que hoy vive momentos que requieren nuevos retos.
El Gobierno canario trabaja en impulsar una política agraria centrada en la producción local para que todos los isleños puedan disfrutar de esos productos frescos, de calidad excepcional y que aportan un valor añadido a nuestro archipiélago como destino turístico.
Programas como Ecocomedores acercan a los más pequeños la importancia de consumir productos frescos y ecológicos, contribuyendo además a la incorporación de los productos de cercanía en los menús de los centros escolares.
Hoy, con el inicio del curso escolar, miles de alumnos tendrán la posibilidad de regresar a sus aulas y a sus comedores para disfrutar de los productos que da la tierra canaria y que sin duda son la mejor opción para mantener una vida saludable.
La consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende, hace hincapié en que el propio consumidor sea el que vele por tener productos canarios en su mesa. «No solo se trata de una medida que contribuye a potenciar nuestro sector primario, sino que redunda en nuestro bienestar y en nuestra propia salud», indica.
Para Vanoostende, «nuestras frutas, verduras, hortalizas, quesos o pescados, entre otros, son toda una joya que tenemos derecho a disfrutar, por lo que debemos seguir trabajando para promover la producción local, al tiempo que reducimos nuestra dependencia del exterior y aminoramos la huella de carbono».
La actividad agraria, que sustenta a tantas familias canarias, tiene una gran arraigo en las islas tanto por su gran apoyo económico, como por su destacado papel social, medioambiental, cultural e identitario.
