Coalición Canaria mantuvo ayer un encuentro con una representación de profesionales socorristas de Las Palmas de Gran Canaria para continuar atendiendo las necesidades del colectivo que permitan dignificar la profesión.

La diputada en el Congreso de los Diputados, María Fernández, se comprometió a llevar a la Cámara Baja la problemática del colectivo, quienes carecen de un convenio laboral propio. Fernández subrayó la importancia de que el sector cuente con seguridad jurídica en sus relaciones laborales y un convenio que los regule. «No puede ser que se les siga aplicando un convenio de monitores deportivos cuando ellos tienen un plus de peligrosidad, riesgo y dedicación», dijo.

Así, señaló que trabajará para conseguir que se elabore un convenio estatal que aúne a todo el colectivo español, ya que en estos momentos hay diferentes tipos salariales según el municipio en el que ejerzan su profesión. La diputada abogó por buscar una norma unitaria que proteja al sector y reconozca su peligrosidad y dedicación, «porque son los primeros a los que acudimos cuando tenemos cualquier tipo de emergencia en las playas, sin olvidar que en Canarias hay más muertes por ahogamiento que por accidentes de tráfico».

Con todo, recordó que también hay que dotarles del valor que se merecen dignificando la profesión, ya que «no son chicos o chicas de verano que tienen cualquier trabajo que les dé algo de dinero, sino que hablamos de trabajadores con un empleo estable con el que mantienen a sus familias y se ganan la vida».

Por su parte, el viceportavoz local de los nacionalistas, David Suárez, recordó que el Pleno del Ayuntamiento rechazó una moción presentada por Coalición Canaria para mejorar las condiciones laborales de los socorristas.

Según el edil, «carece de todo sentido que el Consistorio presente un nuevo contrato en el que se recojan cuestiones mejoradas del anterior y, sin embargo, no incremente el personal, que es una de las reivindicaciones del colectivo, junto con la subida salarial. Ahora mismo en las siete playas de la capital trabaja el personal mínimo que recoge el Plan de Seguridad, teniendo en cuenta que en muchas ocasiones tienen que dejar de vigilar sus propias playas para acudir a atender otra emergencia en otro punto, lo que supone un riesgo para los bañistas que quedan desatendidos».

El representante sindical de los socorristas de Las Palmas de Gran Canaria, David Molina, anunció que convocarán una huelga si no se atiende sus reivindicaciones y se mejoran sus condiciones laborales. «Falta mucho personal, cobramos el salario mínimo interprofesional con el que no nos llega para vivir, y nos jugamos la vida día a día para salvar la de otros que nos necesitan», afirmó, y dijo: «Aún estamos esperando a que el Ayuntamiento se siente a reunirse con nosotros. Si nos hacen caso, no nos quedará otra que convocar manifestaciones e ir a la huelga». Añadió que se sienten desatendidos por parte de la Administración Local y alegó que desde el sector no entienden por qué están en una situación de precariedad, cuando son los encargados de la seguridad de las playas.