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SEGURIDAD

¿Una carrera ilegal tras el atropello múltiple de Díaz Casanova?

Vecinos y empresarios de la zona piden al Ayuntamiento más control de los rallies clandestinos, que agravan el problema de los botellones en el polígono

Imagen del vehículo implicado en el atropello múltiple de Díaz Casanova LA PROVINCIA

¿Hubo una carrera ilegal durante el atropello múltiple que tuvo lugar en la zona del mirador Vista Bella, del polígono industrial Díaz Casanova, en El Cardón, la madrugada del pasado domingo?

La Policía Local de la capital grancanaria ha iniciado una investigación para averiguar si el joven que atropelló a ocho personas estaba participando en una de las carreras que tanto abundan en la zona, tal y como denuncian tanto vecinos como empresarios y reconoce la propia policía. 

Según los datos facilitados por la Concejalía de Seguridad, que dirige Josué Íñiguez, el hombre implicado en el accidente dio positivo en alcohol, aunque no superó los 0,6 miligramos por litro en aire espirado por lo que se le impuso una sanción administrativa, y se le ha imputado un delito contra la seguridad vial, tras resultar lesionadas siete de las ocho personas que fueron arrolladas, tres de ellas de carácter moderado, que tuvieron que recibir asistencia médica tras sufrir traumatismos de distinta índole.

El atropello tuvo lugar en una curva en una rotonda, casi al final del polígono Díaz Casanova y los agentes tratan de dilucidar ahora si el conductor estaba participando en una carrera ilegal o iba a una velocidad superior a la normal.

Residentes de la carretera de El Cardón aseguran que después del accidente «hubo una pelea buena» en la zona. Así, las unidades del GOIAy de la Unidad Especial Nocturna tuvieron que intervenir para desalojar el polígono.

Vecinos y empresarios de la zona han redoblado sus reclamaciones para que haya más control en el polígono y se acabe con las carreras ilegales que, advierten, no hacen más que agravar el problema que existe en la zona por la asistencia masiva de gente y el botellón, que también les causa trastornos por el ruido y la basura.

 El polígono industrial Díaz Casanova y, sobre todo la zona más cercana al denominado Mirador de Vista Bella, se ha convertido desde hace años en un punto de encuentro nocturno, al que los jóvenes acuden en masa a beber, a comer, a fumar shisha y oír la música de los altavoces de sus coches.

El hombre que se mató en agosto de 2020 al despeñarse por un barranco en la zona sigue estando en la mente de los vecinos y algunos lo relacionan con las carreras o el consumo de alcohol. «La gente se hincha a beber y después coge el coche y pasa lo que pasa. Un coche se fue hace años por ahí abajo porque se ponen a hacer rallies», recuerda Pepe Ramón, un vecino.

Las carreras, las escandaleras y la basura que dejan por las calles del polígono son los principales problemas de los que se quejan empresarios y residentes, que reclaman al Ayuntamiento más control.

 Desde la Concejalía de Seguridad aseguraron que el atropello fue «un incidente puntual», al tiempo que rechazaron las críticas de ausencia de control en el polígono Díaz Casanova.

Los coches 'vuelan'


«Esto es un circuito de rallies y los coches pasan volando», advierte Jacinto Ruiz, vecino de El Cardón, quien plantea la necesidad de montar controles permanentes para erradicar esa costumbre. Yluego están las escandaleras. Ruiz y Pepe Ramón aseguran que en la zona no hay quien duerma por el ruido. «Vienen casi todas las noches y están hasta que amanece. Aquí se han llegado a juntar hasta 500 personas y los fines de semana más. Luego se juntan cinco o seis coches en la rotonda con los altavoces y esto parece una discoteca. Se oye el retumbe por todo el barranco», señala Ruiz. Lo primero que se encuentran los empresarios del polígono cuando acuden por la mañana es basura por todos lados. «Lo dejan todo tirado. Está todo el polígono hecho un desastre por las mañanas con envases de cerveza y restos de pizza y las palomas comiendo. Este problema está aumentando».

«Sí se está controlando el botellón en esta zona, al igual que en otros puntos de la ciudad. De hecho, se ha logrado reducir un 70% desde que comenzó la pandemia». Añadieron que en la zona «hay vigilancia permanente por parte del GOIA, Tráfico y la UMEC y todo este trabajo propició una rápida respuesta» cuando ocurrió el último accidente, durante la madrugada del pasado domingo.

No piensan lo mismo los vecinos, quienes critican que falta más control en el lugar. «La policía viene cuando le da la gana y cuando lo hace aparecen con las sirenas desde Guanarteme y la gente cuando ve las ve, apagan la música, dan la vuelta y se marchan. Y cuando se va la policía vuelven», dicen.

 Reclaman también la colocación de reductores de velocidad en la carretera de Chile y, sobre todo, en la parte alta de El Cardón, para evitar que los coches se embalen.

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