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El paisaje de Jinámar mejorará con el cambio de 17 torres de alta tensión

Red Eléctrica moficará seis líneas en las inmediaciones de la subestación de El Sabinal | Urbanismo compra y cede terrenos en la zona para soterrar los cables

Torretas Lomo Sabinal. Jose Carlos Guerra

Si algo caracteriza a la entrada sur de Las Palmas de Gran Canaria eso es una maraña de cables y torretas que sobrevuelan la autovía y los lomos del Cono Sur capitalino. La modificación de seis líneas de alta tensión por parte de Red Eléctrica permitirá reducir el impacto visual de esta infraestructura al sustituir o eliminar hasta 17 torretas de alta tensión, de tal manera que gran parte de las líneas quedarán sin servicio o pasarán a estar soterradas. El proyecto, que ya está en marcha en una fase inicial, supondrá para la compañía una inversión de 2,7 millones de euros.

Las seis líneas que modificará Red Eléctrica están situadas en las inmediaciones de la subestación de El Sabinal. Según la compañía, la idea será mejorar el mallado de la red de transporte de electricidad en la zona y eliminar cruces de líneas aéreas por encima de la GC-1 y frente a la Central Térmica de Jinámar. Estas actuaciones, además, permitirán mejorar el fuerte impacto paisajístico que esta infraestructura provoca en la bifurcación de la autopista del Sur con la circunvalación y la carretera de Cuesta Ramón.

Para sacar adelante este proyecto ha sido necesaria la colaboración de la concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. El área que dirige Javier Doreste ha adquirido una serie de terrenos que eran de titularidad privada en los márgenes de la carretera del Lomo del Sabinal -una estrecha vía que conecta Cuesta Ramón con El Sabinal propiamente dicho-. Estas parcelas han sido cedidas posteriormente por parte del Consistorio capitalino a la compañía estatal de transporte de energía eléctrica para poder acometer el proyecto.

La modificación de estas líneas permitirá eliminar cruces aéreos de cables sobre la autopista

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Según Red Eléctrica, las modificaciones previstas contemplan sustituir parte de las que serán retiradas por tres torretas que estarán situadas entre la subestación de El Sabinal y la Central Térmica de Jinámar. El proyecto incluye nuevos tramos subterráneos de corta distancia. La idea será desviar así parte de las líneas de 66 Kilovoltios -alta tensión- que conectan ambos puntos y eliminar varios cruces aéreos sobre la autopista del Sur y la circunvalación. La compañía indica que esto aportará mayor seguridad a los conductores -por este punto pasa una media de unos 100.000 vehículos diarios-.

El proyecto busca reforzar la garantía y seguridad del suministro eléctrico de la zona norte de la Isla y del área de metropolitana de Las Palmas de Gran Canaria. Una parte de las actuales líneas de alta tensión que cruzan la entrada sur de la capital seguirán haciéndolo. No obstante, uno de los objetivos para crear la subestación de El Sabinal, inaugurada en 2016, ha sido desde el principio hacer desaparecer los tendidos que cruzan la autopista, lo que aportaría más seguridad a la vía y disminuiría el impacto visual en la zona. 

El proyecto dejará sin servicio hasta 3,8 kilómetros de líneas en las inmediaciones de El Sabinal

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Por otro lado, el proyecto contempla el desmantelamiento de otras 14 torretas o apoyos que forman parte de estas seis líneas que serán modificadas. En total, Red Eléctrica calcula que desaparecerán 3,8 kilómetros de tramos aéreos entre las inmediaciones de la subestación de El Sabinal. Los terrenos que ha cedido Urbanismo servirán precisamente para poder soterrar parte de los tendidos eléctricos que ascienden lomo arriba hacia el Sabinal -propiamente dicho- y barrios de la parte alta de la capital grancanaria.

Ejecución del proyecto

«La zona vivirá una mejora notable en la calidad del paisaje», apunta Doreste al respecto. El edil especifica que la compra de terrenos que han efectuado en este punto -para su posterior cesión a una empresa estatal- entra dentro de la estrategia «de conservación del paisaje» que están llevando a cabo en la ciudad y, más concretamente, en el Cono Sur, con la recuperación del Barranco de Gonzalo o la reforestación de la Montaña de Chanrai -en Tafira- tras la reciente compra de la finca.

La ejecución de este proyecto comenzó de manera efectiva en agosto, según apunta Red Eléctrica. Está previsto que estos trabajos se prolonguen durante todo el próximo año, principalmente por la «criticidad» de las líneas sobre las que se va a actuar para el suministro de la Isla y la ciudad más concretamente.

Esta actuación se une a los trabajos que Endesa tiene previsto efectuar en la Central Térmica de Jinámar. La compañía eléctrica tiene previsto demoler una de las dos chimeneas de vapor de Piedra Santa. Con 77 metros de alto, es la más pequeña de las torres que desde la década 1970 han protagonizado el paisaje de la entrada sur de Las Palmas de Gran Canaria. Al igual que la supresión de torretas y líneas que hará Red Eléctrica, todas estas actuaciones permitirán disminuir con creces el impacto visual en el paisaje de la zona.

La demolición de la chimenea se hará en distintas fases dada la complejidad de la obra. Para ello se ha descartado hacer una detonación, por lo que se optará por otras técnicas. La estructura, levantada con hormigón armado en el exterior y ladrillos refractarios en el interior, tiene un espesor en la base que alcanza los 50 centímetros y los 32 en la cima.

Cuello de botella

Hasta la apertura de la subestación de El Sabinal (2016) la de Jinámar presentaba el mayor cuello de botella de todo el Estado por su alta concentración de líneas, según reconoció en su momento la propia Red Eléctrica. Desde entonces la compañía, de titularidad estatal, ha ido revirtiendo esta situación descargando la central situada en Piedra Santa modificando trazados con el objetivo de desconcentrar esta última y mejorar las condiciones de seguridad del transporte de la energía eléctrica, más teniendo en cuenta que estas líneas son las que dan servicio a la capital y a todo el norte de la Isla. Un fallo podía suponer un apagón para varios cientos miles de usuarios. La idea es que poco a poco Jinámar se quede con solo cinco de las trece líneas de alta tensión que tenía inicialmente. En una primera fase se modificaron dos de 66 kilovoltios y la de 220 proveniente de Juan Grande. | A. V.

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