Después de más de 17 años con el edificio de la grada naciente del antiguo Estadio Insular cerrado a cal y canto y en acelerado proceso de deterioro, las administraciones han alcanzado por fin un acuerdo para darle uso sanitario, con dos edificios de tres plantas.
A lo largo del tiempo que ha pasado desde que se jugó el último partido en el mítico estadio a las instalaciones, que siguen siendo propiedad del Cabildo de Gran Canaria, no le han faltado novios, la inmensa mayoría interesados en construir centros comerciales, aparcamientos o bares y terrazas, proyectos que no prosperaron.
El edificio acogerá finalmente un ambulatorio de especialidades y un centro de salud mental infantil, para los que el Servicio Canario de Salud solicitó espacio en su día al Ayuntamiento y este le ofreció la grada naciente a condición de una previa cesión por parte del Cabildo.
Así las cosas, se prevé la construcción de dos edificios sanitarios, que aún no tiene fecha pues sólo existe la voluntad manifestada por el Cabildo de Gran Canaria de emprender la tramitación para la cesión del inmueble.
Esto al menos es lo que anunció este martes en la comisión de pleno de pleno de Desarrollo Sostenible el concejal de Urbanismo Javier Doreste, quien subrayó que la institución insular se ha comprometido a «iniciar los trámites para desagregar la parcela del frente del Estadio Insular que da a la calle Pío XII», que tiene una longitud de 100 metros de largo y 25 metros de fondo.
El acuerdo, indicó el edil, se alcanzó en una reunión celebrada el pasado 20 de octubre, en la que, además de Doreste y responsables del Cabildo, estuvieron presentes titulares de la Consejería de Sanidad del Gobierno canario y del Servicio Canario de Salud (SCS).
Dicho encuentro forma parte de una serie de reuniones que se han mantenido en los últimos meses, según indicó Doreste en una comparecencia en el pleno ordinario de octubre, para «culminar el expediente de cesión».
Una vez desagregada la parcela, añadió este martes, «se cedería a la Consejería de Sanidad» para que construya dos edificios detrás de la fachada. Esos dos inmuebles, que ocuparían una superficie de 7.000 metros cuadrados repartidos en tres plantas, seguirán las directrices, garantizó, del estudio «encargado por Urbanismo en su momento».
Doreste realizó estas afirmaciones durante el debate de una moción presentada por el concejal del Partido Popular Ángel Sabroso, quien propuso instar al Cabildo de Gran Canaria que ceda de una vez el edificio, al tiempo que criticó la demora.
El convenio que se firmó en su día para ceder a la ciudad el espacio del estadio que hoy ocupa el parque y la fachada que da a la calle Manuel González Martín, no incluyó la grada naciente.
Oportunidad desperdiciada
El tripartito rechazó la moción con el argumento de que ya «no es necesario instar al Cabildo» para que ceda el inmueble, porque «ya se ha alcanzado un acuerdo y se han dado pasos para recuperar esa fachada».
Sabroso criticó que, pese al tiempo transcurrido desde que se construyó el parque, «no se haya concretado ningún tipo de uso» para el frente naciente.
«Lo último que hemos oído es que se iba a tener un equipamiento sociosanitario, pero sigue pasando los años y no se hace nada. Es una enorme oportunidad desperdiciada y es necesario rematar la faena ya. Son ustedes más lentos que el caballo del malo. Han tardado siete años en llegar a un acuerdo para desafectar la parcela y definir el uso que tendrá" dijo Sabroso quien expresó su esperanza de que no se tarde el mismo tiempo para hacer realidad el ambulatorio y una unidad de salud mental infantil.
Por otro lado, el PP denunció que el gobierno municipal impidió debatir una moción presentada por su grupo en la comisión de pleno de Organización, «pese a que estaban dictaminada favorablemente por la secretaria del pleno», al tiempo que eliminó dos comparecencias, una decisión que calificó de «indecente» y «antidemocrática».
Los nuevos locales, sin uso
Los nuevos locales que se construyeron en el extremo norte, en la vieja grada de Tribuna, del parque del Estadio Insular continúan cerrados y deteriorándose, ya que el gobierno municipal no se ha decidido aún a darles uso.
El viceportavoz del Partido Popular (PP) Ángel Sabroso criticó el abandono en que se encuentran los locales, pese a que el Ayuntamiento se gastó 2,3 millones en la intervención.
«Todo lo que se ha hecho con ese dinero se está muriendo, sin uso ninguno dos años después de terminados los edificios», criticó el edil. En su día se habló de destinar dos de los locales a Casa de la Juventud y el resto para uso social por los vecinos, pero hasta ahora, lo único que se ha hecho es abrir la entrada al parque por la calle Manuel González Martín, p pese a que las asociaciones vecinales los han reclamado.
