Pendientes de CD y velas de miel

La 28 edición de la feria de artesanía de Navidad, ubicada en San Telmo, se inaugura a lo grande en una jornada marcada por un gran flujo de personas

"Hoy San Telmo lo abrí yo, porque aunque la inauguración de la feria era a las 10 de la mañana, yo llevo aquí desde las 8", asegura Delia Ramírez con una risa nerviosa. Ella, al igual que los 93 artesanos restantes, participa este año en la feria de artesanía que se celebra cada Navidad en el parque de San Telmo, en Las Palmas de Gran Canaria. Este año, se podrá encontrar artesanos representantes de 29 oficios diferentes, de los que nueve son tradicionales y 20 contemporáneos. "Hay un gran flujo de gente, y yo de momento lo veo mejor que otros años. Es la cuarta vez que vengo en Navidad a esta feria", cuenta Delia. En su puesto, que se caracteriza por tener todos los productos hechos con reciclado de CD, lo que más vende son pendientes, que dependiendo del material que se utilice, lleva más o menos horas de trabajo, y es que tal y como explica, "Los CD hay que limpiarlos, cortarlos, llevarlos al horno y algunos llevan tintes".

Dolores Cabrera lleva media hora paseando por esta feria artesanal y no esconde su emoción al recorrer cada rincón de los puestos. "Está muy bonita, yo vengo cada año y me encanta. Todo me llama la atención porque todo es distinto", afirma. Aunque es el primer día de esta feria, Dolores asegura que este año en especial ve que está muy bien, por lo que tiene claro que antes de que se acabe el próximo 5 de enero, volverá con sus nietas "Porque a ellas les encantan estas cosas, y seguro que les compro algo por Navidad", sentencia antes de dirigirse a otro de los puestos, quedándose alucinada con la ropa de punto.

«Siempre me inspiro en mi vida en Arguineguín y muestro con madera rincones de toda la isla»

Entre puestos dedicados a cerámica, joyería o juguetería entre otros muchos, destaca uno en concreto que amontona a varios curiosos que pasean por la feria. Se trata del stand de Vesna Haler, natural de Croacia aunque lleva más de 30 años en la isla, y que se dedica a hacer miniaturas. "Me inspiro siempre en mi vida en Arguineguín y muestro rincones de toda la isla". Vesna lleva años dedicándose a plasmar rincones de su vida en madera reciclada que encuentra tanto en su casa como en la calle, ya sea de mesas o patas de sillas, y aunque cada año se siente satisfecha por lo que se vende, asegura que lo más importante es "Mostrar lo que tengo escondido detrás de mi corazón". 

Aunque era la inauguración de la feria, muchos artesanos coincidían en que el flujo de personas que se estaba acercando superaba las expectativas de los años anteriores, y es que no sólo había canarios, sino que algunos aprovecharon sus vacaciones en la isla para curiosear y descubrir. Es el caso de Esther y Helio, de Murcia y Galicia respectivamente, que acaban de aterrizar en la isla pasar estos últimos días de vacaciones navideñas y se encontraron con esta feria de artesanía. "Nos está gustando mucho la organización, y sobre todo los puestos de cerámica. Antes de volvernos a la Península volveremos para comprar algo y llevárnoslo de recuerdo", aseguran encantados.

Éxito en ventas

Dailos Delgado es el encargado de uno de los puestos de cuchillería, inspirado en cuchillos canarios. "De momento la jornada va muy bien, y aunque el día está empezando, espero que vaya a mejor a lo largo del día". Él ha traído un total de 52 cuchillos, una cantidad que podría quedarse corta teniendo en cuenta que a pocas horas de la inauguración de la feria, ya ha vendido seis. "Los precios van desde 150 euros hasta los 180 y luego los tenemos de gama más alta que los tenemos desde 200 hasta 500 euros", asegura. Un trabajo artesanal que requiere varias horas de trabajo "Un cuchillo sencillo son dos días de trabajo a piñón en el local, un total de 13 horas diarias".

«Ha sido la mejor inauguración de mi vida. Llevamos tres horas y ya he vendido 25 cajas de velas»

En términos generales, las ventas y la ilusión de los artesanos ha aumentado en relación con otros años. "Ha sido la mejor inauguración de mi vida", asegura Vera, fundadora de VerArte. "Es un público muy bueno, y para mi es una feria de lujo" cuenta entre risas. Su puesto de velas es uno de los más visitados durante esta feria de artesanía, hecho que explica la demanda que tiene en la fabricación de sus velas. "La feria se inauguró hace tres horas y yo ya he vendido 25 cajas, que cada una conlleva 12 velas. Todos los días traigo 25, por lo que hoy ya no me quedan", explica.

Patricia Ferrari, por su parte, también tiene buenas sensaciones este 2023 con esta feria de artesanía navideña. "Las ventas me van muy bien de momento. Veo bastante gente y mucho movimiento para ser un día laborable". Jabones, champús, cremas exfoliantes y un sinfín de productos naturales y fabricados por ella misma que hace que las horas que le dedica a hacer cada uno de ellos valga la pena. "Yo adoro mi trabajo y por eso no me cuesta tanto".

Una feria artesanal que cada año congrega a muchos artesanos y que según el presidente del Cabildo insular, Antonio Morales, tiene un balance de ventas entre los 150.000 y los 250.000 euros según la edición. Una iniciativa que motiva a muchos de los visitantes que suelen acudir cada año y que coinciden en un pensamiento: "Estas ferias deberían organizarse varias veces al año".

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