Alcaravaneras y Guanarteme cierran el año con el alquiler en máximo histórico

El precio del metro cuadrado en la capital grancanaria roza ya los 11 euros, un 8,7% más que hace un año

El precio del alquiler se dispara en Alcaravaneras en 2022.

El precio del alquiler se dispara en Alcaravaneras en 2022. / ANDRES CRUZ

El alquiler en Las Palmas de Gran Canaria sigue sin tocar techo. Los barrios de Guanarteme, Alcaravaneras y Tamaraceite cerraron el año con los precios del mercado inmobiliario en máximos históricos. Según datos del portal Idealista, el precio del metro cuadrado en estos tres barrios de la capital alcanzó en diciembre los 13, 11,1 y 8,9 euros respectivamente. Arrendar una vivienda en la ciudad es cada vez más difícil, a los altos precios hay que sumarle una oferta escasa que es incapaz de absorber la alta demanda existente. Ambas tendencias escalaron a lo largo de todo el 2022.

En el conjunto de la capital, el precio del metro cuadrado vuelve a subir y romper el máximo histórico que ya había alcanzado en el mes de septiembre. Se acerca ya a los 11 euros (10,9), una cifra que nunca se había igualado en el portal inmobiliario, con datos disponibles desde 2010. Así, arrendar un piso de 80 metros cuadrados supone para una familia un coste de 872 euros, cuando hace tres meses la media estaba en 856.

En todo el año pasado, el precio del metro cuadrado escaló un euro. En enero tenía un coste en régimen de alquiler de 9,90 euros. Según el portal inmobiliario, la subida interanual ha sido del 8,7%. Esto supone el mayor encarecimiento de la vivienda en la capital desde 2017, cuando las mensualidades escalaron un 16,7% en vista de la recuperación económica tras la crisis financiera de 2008 y tras varios años de bajadas.

La zona más cara para alquiler en la capital es Santa Catalina Canteras, donde el precio del metro asciende ya a los 13,3 euros. No obstante, la subida anual ha sido del 5,3%, inferior al que han vivido los barrios aledaños. De esta manera, la presión inmobiliaria se ha ido trasladando a Guanarteme, Alcaravaneras y La Isleta, con incrementos de entre el 12,5% y el 13,7%. De hecho, este último tocó techo en octubre.

La situación en el resto de la ciudad no es mucho mejor. En Ciudad Jardín el incremento anual ha sido del 26,5%, en Tamaraceite del 16,5% y en Arenales del 8,5%; todas estas zonas alcanzaron máximos en la segunda mitad del año pasado. En Ciudad Alta (6,7%) y el Cono Sur (6%) las subidas han sido más moderadas. En estos dos últimos casos, el metro cuadrado está ya a 9,2 y 8,2 euros respectivamente.

Escasa oferta

A esta escalada de los precios habría que sumarle la escasa oferta. Hasta hace poco más de un año, en el portal inmobiliario habitualmente había entre 800 y 900 ofertas de viviendas en alquiler en la capital grancanaria. En octubre, tras el verano, rondaban las 500; ahora el portal no logra alcanzar la cantidad de 450 anuncios publicados a la vez.

Esta falta de vivienda en alquiler se hace especialmente notoria en los barrios antaño a precios más asequibles. Así, el pasado viernes no había ni un solo anuncio en la Vega de San José, aunque se han llegado a ver en los últimos meses pisos por mil euros en edificios recién rehabilitados por el Ayuntamiento con dinero público y que hasta hace un año carecían de ascensor. Los precios varían entre un estudio interior en la zona Triana por 430 euros y los 8.000 de un chalet de 600 metros cuadrados en Ciudad Jardín. 

Los expertos en el mercado inmobiliario achacan este fuerte incremento a varios factores. De hecho, los agentes califican la situación como «una locura». Hasta tal punto que los anuncios inmobiliarios duran de media tan solo dos días publicados y muchos no llegan siquiera a las 24 horas ante la cantidad de peticiones.

La proliferación de alquileres vacacionales -en detrimento del alquiler convencional y residencial, la falta de vivienda pública a precios asequibles o la desconfianza de numerosos propietarios a poner su casa en el mercado por temor a impagos u otras problemáticas, de tal manera que prefieren tener los inmuebles vacíos, son algunas de las causas que han expuesto los expertos.

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