Las viviendas de Sanz Orrio ahorrarán un 30% de energía tras la rehabilitación

El proyecto de mejora de las 168 viviendas en La Isleta contempla cambiar los termos por bombas de calor y poner placas solares para las zonas comunes

Las 168 viviendas del grupo Sanz Orrio, en La Isleta, ahorrarán un 30% en la factura de la luz tras su rehabilitación. El área de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha remitido el proyecto de mejora y reforma de los edificios que componen la urbanización al Ministerio de Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Los trabajos en estos bloques de pisos de los años 50 supondrán una inversión de 1,8 millones de euros.

El grupo Sanz Orrio se encuentra delimitado por las calles Faro, Blas de Lezo, Luján Pérez y Tinguaro. La urbanización está compuesta por cinco bloques de cuatro alturas sin ascensor y donde las viviendas apenas superan los 45 metros cuadrados. La idea será darles un lavado de cara integral y mejorar los edificios, sumamente deteriorados por el paso del tiempo dados los precarios materiales de construcción que se utilizaron en su momento.

El proyecto ideado por los técnicos municipales para ahorrar en la factura de la luz es similar al que han redactado para La Paterna y la fase tres de Jinámar. La propuesta de mejora centra así sus esfuerzos en la instalación de bombas de agua caliente, placas solares fotovoltaicas, mejoras en el aislamiento térmico de las cubiertas y en el revestimiento exterior.

Las azoteas de los edificios están en mal estado, con filtraciones y humedades

Las bombas de calor o aero termos son una alternativa a los termos tradicionales para calentar el agua en las viviendas. Estos ofrecen una mejor eficiencia energética, según detalla la memoria del proyecto, ya que aprovechan la energía del ambiente para generar electricidad. La idea será cambiar los termos que existen hoy día en todas y cada una de las viviendas de la urbanización. El documento especifica que solo esta actuación permitirá reducir en un 75% el consumo de luz a la hora de utilizar agua caliente.

En cubiertas habrá una impermeabilización integral. Actualmente, las azoteas de los edificios presentan un estado «deficiente» con una serie de problemas de filtraciones y humedades. Los materiales que se utilizarán favorecerán el aislamiento térmico. Esto favorecerá el «confort y bienestar» de los propietarios de las viviendas superiores de los edificios.

Sobre el pavimento, que será transitable, se propondrá la colocación de placas solares fotovoltaicas para la reducción del consumo eléctrico. Dadas las reducidas dimensiones de las cubiertas de los inmuebles, estas solo podrán generar energía para las zonas comunes de los bloques; aún así, supondrá ahorrar un gasto periódico a los vecinos.

Entorno de los edificios

En cuanto a la rehabilitación de las fachadas, se actuará haya donde existan problemas de grietas o filtraciones. Además, serán pintados de colores claros en lugar del rojo oscuro que predomina actualmente. El cambio de tonalidad tendrá como objetivo, reza el documento, que las paredes absorban menos radiación solar, por lo que se regulará mejor la temperatura dentro de las viviendas.

Los trabajos también contemplan la mejora y adecuación del entorno de los edificios, que al igual que en La Paterna o Jinámar, estas mejoras serán consensuadas con los vecinos. Así, habrá un acondicionamiento y ajardinamiento de los pasajes que dividen los bloques -calles Jerez, Gijón y Sol-, se eliminarán barreras arquitectónicas con vistas a favorecer la accesibilidad de los inmuebles. Actualmente, ninguno de estos bloques de cuatro plantas tienen ascensor, aunque la posibilidad de incluirlos no se contempla de manera explícita en la memoria. 

Estas casas baratas se construyeron dentro del plan sindical de 1954-1955 de la Delegación Nacional de Sindicatos y fueron entregadas en 1955. De hecho, uno de los bloques conserva en el lateral que da a la calle Luján Pérez el yugo y las flechas falangistas. Este planeamiento del sindicato vertical del franquismo incluyó otros grupos de viviendas repartidas por el municipio, entre las que se encontraban las 96 casas de Ramón Suárez Franchy en Lomo Apolinario, cuyos rehabilitación por parte de Urbanismo empezó a finales del año pasado.

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  • Fisonomía.

168 viviendas

El grupo Sanz Orrio está formado por 168 viviendas repartidas en el rectángulo formado por las calles Faro, Blas deLezo, Luján Pérez y Tinguaro, en La Isleta. Están repartidas en cinco bloques de cuatro plantas y un total de ocho portales. Las casas tienen unos 45 metros cuadrados de superficie.

  • Antigüedad

1954-1955

Las viviendas de Sanz Orrio tienen más de 60 años de antigüedad. Fueron construidas dentro del plan de sindical de vivienda 1954-1955 y se entregaron en octubre de 1955. Se construyeron con materiales precarios para dar respuesta a la demanda de casas por el éxodo rural.

  • Población

Mil vecinos

En Sanz Orrio viven aproximadamente unos mil vecinos. Principalmente, se trata de familias de recursos económicos bajos. Muchas de estas son las mismas que llegaron en los años 50, por lo que se trata de una población notablemente envejecida.

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