Salvamento Marítimo presenta su nuevo sistema de rescate inteligente

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) presentará en el Auditorio Alfredo Kraus el proyecto iSAR, un programa integral de innovación tecnológica con el que Salvamento Marítimo aspira a revolucionar sus centros de Madrid, Tenerife y Las Palmas para acotar los tiempos de rescate en el mar y la detección de los vertidos, entre otro objetivos.

El presupuesto del proyecto, que comenzará a aplicarse este verano en Canarias, asciende a 20 millones de euros financiados casi en su totalidad (85 %) por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Entre las innovaciones tecnológicas, destacan equipos con aeronaves no tripuladas, una red de nuevos sensores inteligentes de detección automática, y un sistema de comunicación en tiempo real que permitirá compartir información entre los medios marítimos, aéreos y los centros de coordinación terrestres.

Estos sistemas, que previsiblemente estarán operativos en verano, facilitarán la localización de náufragos por la noche o de objetos peligrosos que dificulten la navegación, entre otras operaciones complejas, y permitirán desarrollar una red de comunicación interna entre todas las unidades desplegadas en el servicio de rescate, independientemente de la distancia a la que se encuentren de la costa.

Todas las unidades que participen en la emergencia activada, desde el helicóptero o el avión SAR hasta las embarcaciones desplegadas o el centro de control en tierra, podrán tener y compartir información a la vez, mejorando así el flujo de comunicación en tiempo real. Esto antes solo era posible cuando la incidencia sucedía cerca del litoral. De ahí la importancia del avance para mejorar la coordinación entre todos los implicados.

Estos medios no sólo servirán para localizar náufragos y objetos con mayor rapidez, sino también para medir emisiones de gases contaminantes con mayor seguridad, incluso para detectar atmósferas nocivas y peligrosas en accidentes marítimos.

Los objetivos generales del iSAR, por tanto, son mejorar la eficacia en la búsqueda y los rescates, incrementar la capacidad de vigilancia aérea para combatir la contaminación, optimizar los recursos para reducir los tiempos de respuesta en las emergencias, y mejorar la calidad del aire mediante el control atmosférico de las emisiones de los buques.

En esta nueva estrategia de actuación tendrán un papel clave los drones o aeronaves no tripuladas, que mejorarán su autonomía y velocidad para incrementar el radio de acción, pudiendo operar desde los barcos al estar preparados para despegar y aterrizar en vertical.

Salvamento Marítimo de Las Palmas espera recibir el nuevo dron en junio, aunque no será la única novedad. Su personal también recibirá un entrenamiento específico para manejar los nuevos sistemas de sensores y de comunicación que se incorporará a las embarcaciones y las aeronaves existentes, las cuales serán sometidas a adaptaciones para incorporar la nueva tecnología de rescate.

Salvamento Marítimo tiene desplegados en Canarias (una con base habitual en el archipiélago y dos más que se han enviado para reforzar las labores de inmigración irregular) y una decena de embarcaciones de intervención rápida o salvamar, que se han reforzado con más personal para la intervención en materia de inmigración.

Pero no toda esa infraestructura va a ser adaptada. El sistema de respuesta en emergencias marítimas que se probará en aguas isleñas contará con una aeronave no tripulada, un avión de salvamento marítimo (Sasemar 103), un helicóptero (AW139), dos embarcaciones rápidas (tipo salvamar o guardamar) y un remolcador.

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