Tres jóvenes a juicio por la muerte del hijo del presidente de la Casa de Galicia

El Juzgado de lo Penal número 2 de Las Palmas de Gran Canaria acoge el próximo lunes, 17 de febrero, el juicio contra tres jóvenes acusados de participar en la muerte violenta de Sergio Aneiros Bueno, miembro de la Banda de Gaitas de la Casa de Galicia e hijo del presidente de la entidad. El joven, de 20 años, falleció el 24 de febrero de 2022 después de recibir una patada en el estómago en las zonas comunes de un bloque residencial de La Minilla. El acusado de propinar el golpe mortal se enfrenta a una pena de hasta nueve años de cárcel por lesiones, robo con violencia y omisión del deber de socorrer a la víctima, que según los peritos podía haberse recuperado si hubiera recibido asistencia sanitaria inmediata.

El fiscal Pedro Gimeno solo eleva su escrito de acusación contra Luis Alejandro M. V. y Aimar G. H., que supuestamente acudieron sobre las siete de la tarde a las inmediaciones de un inmueble de la calle Antonio María Manrique, donde se habían citado con Irene L. R. Ella, según la acusación, había sido pareja sentimental del primero, con el que seguía manteniendo una amistad, y con el segundo había participado en algunas relaciones de sexo grupal.

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La joven acudió al encuentro acompañada de su amigo Sergio Aneiros, con quien había mantenido una relación amorosa tiempo atrás, tras pedirle compañía porque decía temer por su integridad física. La Fiscalía cree que mientras Aimar permanecía oculto fumando hachís detrás de un murete, los otros tres descendieron los escalones de acceso a las zonas comunes del edificio e iniciaron una discusión entre los varones por "causas atenientes a la relación sentimental" que hubo entre Luis Alejandro e Irene. En el curso de esta, el acusado habría recriminado al gaitero por enfocarle con la linterna del móvil.

Uno de los jóvenes presuntamente lo grabó mientras estaba inconsciente y se burló con los otros acusados

La acción presuntamente desencadenó un enfrentamiento en el que Luis Alejandro le dio un manotazo al teléfono, Aneiros se abalanzó sobre él y el acusado respondió con una "fuerte patada lateral" que le impactó en el costado y le hizo caer hacia atrás en estado de inconsciencia. El Ministerio Público sostiene que la situación se prolongó por lo menos hasta las 19:44 horas, momento en el que la joven comprobó que seguía sin despertarse y le arrojó agua en la cara para intentar que se recuperara.

En ese momento, según el escrito de acusación, Aimar empezó a grabar a la víctima con su móvil mientras se escuchaban de fondo los comentarios en tono de broma de Irene y Luis, que revelaban "la falta de conciencia de la situación de peligro que para la vida de Aneiros pudiera derivarse de la no asistencia por personal sanitario". Los dos varones, sobre las 21.15 horas, presuntamente se apoderaron del teléfono móvil y del reloj inteligente que portaba la víctima y se marcharon del lugar, dejando a Irene a su cuidado.

Causa del fallecimiento

La joven llamó a dos amigos para pedir consejo y a las 21:23 horas avisó a una vecina que circulaba por la zona para pedirle que llamara al servicio de emergencias. La unidad medicalizada llegó en menos de diez minutos e intentó reanimarlo, pero, al no conseguirlo, lo derivaron al hospital Doctor Negrín en situación de parada cardiorrespiratoria, por lo que falleció finalmente a las 22:49 horas.

"Alejandro M. S., si bien no tuvo intención de acabar con la vida de Sergio Aneiros, no midió la intensidad de la patada que empleó, ni dirigió la misma a las extremidades inferiores o superiores, eligiendo como punto de impacto la zona abdominal, con el consiguiente riesgo de que se pudiera ver afectado cualquiera de los órganos o vísceras allí existentes", mantiene la Fiscalía. En su escrito, considera que facilitaron su fallecimiento por su "incapacidad para detectar la situación de riesgo vital, acompañada de importantes dosis de inmadurez y falta de empatía".

La Fiscalía cree que no lo auxiliaron por "importantes dosis de inmadurez y falta de empatía"

El Ministerio Público atribuye a Luis Alejandro un delito de lesiones en concurso ideal con homicidio imprudente y un delito de robo con violencia, por lo que pide siete años de prisión, mientras que para Aimar pide dos años de cárcel por robo con violencia. Ambos se enfrentan a pagar una indemnización de 96.427 euros por daños morales al presidente de la Casa de Galicia y a la madre del fallecido.

La acusación particular, que ejerce el abogado José María Guerra en representación de los padres de la víctima, sienta además en el banquillo de los acusados a Irene L. R., para la que pide una multa de 12 meses con una cuota diaria de 12 euros por omisión del deber de socorro. Su pena solicitada también es más alta para Luis Alejandro (nueve años de cárcel), y para Aimar (tres años).

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Las defensas, que ejercen los letrados Armando Martin Bueno, Ylenia González Pérez y María Rosa Díaz Bertrana, pedirán en cambio la libre absolución.