Una pedida de mano mágica a bordo de una guagua en Las Palmas de Gran Canaria

Un trabajador de Guaguas Municipales convierte su ruta diaria en el escenario perfecto para una propuesta de matrimonio inolvidable tras 13 años de amor

Pedida de mano en una guagua en Las Palmas de Gran Canaria

La Provincia

Las Palmas de Gran Canaria

En Las Palmas de Gran Canaria, una guagua amarilla —esas que todos reconocen al instante— fue testigo de un momento que tocó el corazón de quienes lo vivieron y de quienes ahora lo descubren. Un trabajador de Guaguas Municipales convirtió su jornada en un recuerdo imborrable al pedirle matrimonio a su pareja, con quien lleva compartiendo la vida desde hace más de 13 años.

No hubo flashes ni escenarios de película, pero sí hubo algo mucho más potente: emoción real, cariño sincero y una historia que demuestra que el amor también viaja en guagua, como se demuestra en el vídeo que encabeza esta información publicado por la compañía Guaguas Municipales.

El vehículo partió desde El Sebadal como cualquier otro día, pero esta vez con un mensaje que transformó la rutina en magia: “¿Nos casamos?”. La sorpresa fue total. La protagonista, entre lágrimas y sonrisas, no tardó en responder con un “sí” que llenó de alegría el corazón de todos los presentes.

Rosas, luces y una familia que lo preparó todo con el alma

En el interior de la guagua todo estaba listo. No faltaron las rosas, las luces LED ni lo más importante: el calor de una familia que quiso acompañar y arropar este instante tan íntimo y especial. Todo estaba pensado con detalle, con cariño, con esa ternura que solo nace de un amor duradero y verdadero.

Después de más de una década construyendo una vida juntos, él decidió dar el gran paso. Lo hizo en el lugar donde pasa sus días, donde la rutina se mezcla con los sueños, demostrando que los momentos más importantes no necesitan grandes escenarios, solo un corazón dispuesto y una persona con la que compartirlo.

La magia de lo cotidiano

“Los mejores momentos suceden en nuestra casa”, decía el mensaje que cerraba el vídeo de esta pedida tan especial. Y es que a veces no hace falta viajar lejos para vivir algo inolvidable. Basta con un gesto sincero, un entorno familiar y un amor que lo llena todo.

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