Nuevos colores en Hoya de La Plata para mejorar la entrada a Las Palmas de Gran Canaria

Una nueva cara para la entrada a la capital, eso es lo que persigue el Cabildo insular con la iniciativa 'Mejora de fachadas en Hoya de La Plata' como parte de un proyecto de mejora urbana y paisajística en el barrio. La intervención se llevará a cabo en dos fases, en las fachadas de 104 edificaciones y 166 paramentos que abarcan una superficie de 15.364 metros cuadrados y contará con una inversión de 666.329 euros, a través de la Consejería de Política Territorial y Paisaje.

Su titular, la consejera Inés Miranda, acompañada por el equipo de la Unidad del Paisaje, la dirección insular y la jefatura de Servicio Técnico, así como del equipo redactor del proyecto, Arquitectura ANCA SLP, técnicos de Tragsa y el teniente de alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Pedro Quevedo, presentó este miércoles a los vecinos la iniciativa como parte de las actuaciones vinculadas al Plan Territorial Especial del Paisaje (PTE-5), el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria y el Proyecto director de Regeneración paisajística de la GC-1.

La intervención pretende modificar la imagen y el paisaje en el acceso sur de la ciudad, además de llevar a cabo otras actuaciones de regeneración paisajística entre los años 2025 y 2027. Esta actuación está relacionada con otras cuatro localizadas en el entorno de la playa de La Laja y Hoya de La Plata, dos de ellas ya finalizadas y vinculadas con la mejora del entorno de la antigua estación de servicio de La Laja y la iluminación del acantilado de La Laja, y otras dos vinculadas a la regeneración paisajística del aparcamiento y acceso a la playa de La Laja y el parque periurbano de Hoya de La Plata, este último como proyecto de interés insular, en tramitación aún para su aprobación definitiva.

Las dos fases en detalle

Los responsables del proyecto explicaron que para cada fachada a tratar se ha elaborado una ficha, con datos de identificación, fotografía, posición, levantamiento de plano de fachada y síntesis del tratamiento que se propone para cada caso.

La primera fase incluye el tratamiento de 72 paramentos de 47 viviendas del barrio en el sector sur, con una superficie total de actuación de 7.136,02 metros cuadrados. Esta obra cuenta con un plazo de ejecución de 6 meses y un presupuesto total de 317.844,18 euros.

Nuevos colores en Hoya de La Plata

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La segunda fase, que se iniciará en los próximos meses, incluye el tratamiento de 94 paramentos de 57 viviendas situadas en el sector norte del barrio, con una superficie total de actuación de 8.228,05 metros cuadrados, un plazo de ejecución de 6 meses también y un presupuesto total de 345.485,72 euros.

Un barrio de autoconstrucción

El barrio de Hoya de la Plata es un conjunto de autoconstrucción residencial en ladera que presenta una edificación heterogénea en cuanto a su disposición, diseño y altura. La trama urbana se articula a partir de un eje viario en zigzag, siguiendo la estructura topográfica, del que parten las transversales en pendiente resueltas con escalera.

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Entre los aspectos detectados en la zona destacan fachadas que carecen de homogeneidad cromática, el deterioro de algunas medianas, que en ocasiones se utilizan como soporte de carteles publicitarios, el asiento de edificaciones sobre ladera en muros de contención que generan impacto visual, grafitis, descuido de taludes y vegetación y vacíos sin tratamiento.

De ahí que la propuesta plantea una configuración del área urbana, en ladera y a partir de unidades adosadas, lo que genera conjuntos de planos donde se combina el gradiente de cercanía al litoral con la altura, y donde los planos paralelos y transversales a la costa se entremezclan "a modo de collage".

El proyecto plantea una estrategia articulada en una doble paleta de color y textura, con una combinación heterogénea, lo que permite mantener el carácter propio de un barrio de autoconstrucción. Para ello, la ejecución diferencia dos subconjuntos de fachadas. Por un lado, las fachadas paralelas al litoral, con cuatro planos generales consecutivos y para las que se propone un tratamiento de textura lisa y satinada, en cuatro tonos de color, a partir del 'tierra oscuro'.

Y, por otro, las fachadas transversales, que presentan una multitud de líneas que asimismo se ven alteradas por su relación con el litoral y donde, además, se singularizan aquellas que mantienen un vínculo directo con espacios libres del barrio. En este caso, se plantea un tratamiento de textura rugosa, con cuatro tonos de color para los planos generales, a atenuar según se sitúan más altos y alejados del litoral; además de otros cuatro tonos a aplicar a los paramentos que envuelven los espacios libres. El color parte de una mezcla de tonos pardos y verdosos.

La actuación que se lleva a cabo se refiere a tratamientos de paramentos verticales, con asignación de textura y color, lo que implica el tratamiento del soporte atendiendo a sus patologías previas (desconches, carbonatación, decoloración, fisuras, eflorescencias -manchas blanquecinas que aparecen en superficies que han sufrido humedad-, humedades, y suciedad) y la posterior aplicación del material de acabado correspondiente.

El objetivo es conseguir una imagen renovada de esta parte de acceso a la ciudad que potencie, además, los valores paisajísticos del entorno.

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