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El 'Don Juan Tenorio' más criminal llega a Schamann

La función transportó al público al hampa de la década de los 20 en Estados Unidos

Las Palmas de Gran Canaria

La obra teatral Don Juan Tenorio regresa a la ciudad, y lo hace este año con una propuesta que rompe con lo habitual. La representación, vinculada desde hace décadas a la tradición de la Noche de Finaos, convoca cada año a los amantes del clásico de José Zorrilla. Por primera vez, sale del casco histórico para representarse en el parque Don Benito, en Schamann, donde el público pudo adentrarse en una atmósfera inspirada en la criminalidad y el hampa de los Estados Unidos de los años 20. La función, abierta al público de manera gratuita, cuenta con un nuevo pase hoy a las 20:30 horas.

El protagonista creado por Zorrilla siempre ha simbolizado el mal, el egoísmo y el deseo de transgresión, elementos presentes en cualquier época y sociedad. Esta universalidad ha permitido al director, José Luis Massó, mantenerse fiel al espíritu de la obra y, al mismo tiempo, arriesgar en la puesta en escena. El resultado sitúa al espectador ante la experiencia de la ley seca, los bares clandestinos y los clubes de jazz donde reinaban la decadencia, el misterio y el exceso.

La música envuelve la obra

La música jugó un papel esencial. Un quinteto de jazz acompañó en directo la evolución dramática de los personajes, aportando matices emocionales a cada escena. Entre los temas interpretados estuvieron Nature Boy, Summertime, Dream a little dream of me, It don’t mean a thing y Basin Street Blues, entre otros. El responsable musical, Ximo Martínez, quiso equilibrar melodías conocidas con otras menos populares para sorprender al público. «El jazz es una expresión libre que, como Don Juan, desafía las estructuras convencionales, unir el drama con el jazz es resaltar la pasión, la improvisación y la intensidad de la vida», apuntó el director de la representación.

La trama del clásico se mantuvo sin alteraciones. La historia comienza con Don Juan y su amigo Luis Mejía compitiendo por ver quién ha matado a más hombres y seducido a más mujeres durante un año. Don Juan resulta vencedor tras batirse en duelo en 32 ocasiones y conquistar a 72 mujeres. Sin embargo, Mejía le lanza un nuevo reto: seducir a una novicia, una joven a punto de tomar los hábitos, y enamorar también a una mujer comprometida.

Don Juan acepta el desafío de inmediato. Su primera víctima será Ana de Pantoja, la prometida de su propio amigo. Para lograr su propósito, secuestra a Luis e irrumpe en la casa de Ana. Pero sus acciones no solo afectan a él y a su rival porque cuando el padre de Inés, la joven destinada desde niña a un futuro religioso y prometida a Don Juan, descubre lo ocurrido, rompe el compromiso. A pesar de ello, el protagonista consigue embaucar a Inés, cuya inocencia y pureza la hacen especialmente vulnerable.

En una trifulca posterior, Don Juan mata a Don Luis y al padre de Inés, y la joven muere de pena. El protagonista huye a Italia, donde permanece cinco años. Cuando regresa, se encuentra con el recuerdo de sus víctimas convertido en espectro. Los espíritus intentan arrastrarlo al infierno, pero el de Inés intercede para conseguir su salvación y que ascienda al cielo.

El elenco

La edición de este año se presenta bajo el título Los ecos de Don Juan, en referencia a la memoria colectiva que este texto teatral ha construido en la ciudad. Muchos palmenses acuden cada año a su representación y reconocen de inmediato sus versos. «Este eco que, cuando lo escuchamos, nos hace volver la cabeza e incluso que seamos nosotros mismos los que continuemos recitando sus versos», subraya el equipo de dirección.

Sobre el escenario, Toni Báez asumió el papel de Don Juan, mientras que María Quintana interpretó a la etérea Doña Inés. Completaron el reparto Miguel Ángel Maciel como el imponente Don Gonzalo, María Filomena como Ciutti, Jon Arráez en el papel de Don Luis y Thania Gil como la intrigante Brígida.

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