Ya no queda nada para que el 22 de diciembre se celebre el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. Apenas hay alguien que no se haya hecho todavía con un décimo, soñando que el número que representa le traiga alegría, ilusión y dinero. Mucho dinero. Como el que trajo Gran Canaria en 2017; 190 millones de euros.

Gran Canaria estuvo durante semanas dentro de los planes de la Diosa Fortuna

Se trata del mayor premio repartido en Europa hasta la fecha -aparte del premio que recibió el irlandés Adrian Bayford en 2012-. Todo el mundo ha soñado alguna vez con llevarse el Gordo de la Lotería, ya sea la navideña o la Lotería Nacional. Todo el mundo ha soñado con lo que haría si fuese rico, y seguro que quien se llevó esos 190 millones de euros lo hizo alguna vez.

Claudia Reyes, hija de la dueña de la administración 54 de Gran Canaria, situada en el centro comercial El Mirador, fue quien selló el boleto ganador del Euromillones del 6 de octubre. Pero lo curioso es, que a día de hoy, se desconoce la identidad del ganador -o ganadora- de tan ingente cantidad de dinero. 

Ese alguien del que nadie sabe nada apostó 2,5 euros y se marchó sin dejar rastro. La leyenda de la zona empezó diciendo que se trataba de un hindú, luego de un chino, y después de un trabajador de Eroski. 

Lo más curioso es que el centro comercial que repartió ese boleto ya no dorado si no de color diamante es un lugar de paso para muchos canarios y extranjeros, por lo que cualquiera pudo llevarse esos 190 millones.

La suerte de El Gordo, la más curiosa

Hay una creencia bastante extendida en torno a la suerte que dice que cuando hay una catástrofe los astros se alinean y abrazan a la gente. Puede que algo de eso ocurriera en Gran Canaria en 2017, ya que tres semanas antes de repartir el premio un incendio arrasó 2.800 hectáreas de la isla, llevando consigo la vida de una mujer.

Desde aquel entonces, el teléfono no deja de sonar en la administración 54 de Gran Canaria; todos quieren comprar un décimo allí. Sea el número que sea, mientras salga del mismo lugar.

Lo mismo ha pasado este año con el décimo 19.921 de la Lotería de Navidad, fecha de la erupción del volcán de La Palma.

Pero no, nada más se supo de aquel ganador o ganadora, quizá esté ahora mismo dándose un paseo en su Cadillac de exposición, o puede que esté tomándose un café en cualquier cafetería del mundo. 

Lo que sí se sabe es que el día 22 de diciembre cualquiera puede repetir su sino en el Sorteo Extraordinario