SEAT nos citó en Ávila para que probáramos su nueva gama TGI. En concreto, los León, Ibiza y Arona con una variante de motorización que se alimenta fundamentalmente de Gas Natural Comprimido (GNC) y que mantiene un pequeño depósito de gasolina para ampliar su autonomía. Pero, ¿por qué ha puesto su punto de mira en este combustible alternativo que, a día de hoy, no cuenta con ningún punto de abastecimiento en Canarias?

En efecto, su red aún es limitada. A penas hay 65 gasineras operativas en todo el territorio nacional, pero a finales de 2019, según explicó Mikel Palomera, director general de la marca española, se habrá ampliado a un centenar. Pero su potencial radica en que, en un entorno de demonización del diésel y en el que urgen soluciones que hagan caer en picado los consumos y las emisiones, el gas natural comprimido parece una respuesta factible. Frente a la gasolina reduce los niveles de CO2 un 25% y, frente a un diésel, en un 75% los de NOx.

Con un precio de 90 céntimos de euro por kilogramo de GNC y unos motores aún más frugales que sus homólogos de gasolina, SEAT considera que tiene en sus manos una tecnología con la que ofrecer eficiencia, sostenibilidad y un precio asequible a sus clientes. No en vano, el sobrecoste de un modelo de la gama TGI respecto a su equivalente en gasolina es de mil euros; sin embargo, su coste por kilómetro es hasta un 50% más competitivo; un 30% más económico que un diésel; un 25% más que un híbrido no enchufable y un 10% más barato que uno alimentado por GLP. Bajando más a la tierra, con el coste de entre 3,15 y 3,24 euros cada 100 kilómetros que, de media, ofrece la gama TGI, un TSI de SEAT podría recorrer 49 kilómetros y un TDI, 61 kilómetros.

Tal es la fe de SEAT en este tipo de combustible alternativo que hay planes para promover la producción de GNC renovable. Los datos de ventas también reafirman esa confianza en quienes llevan el timón de la marca. En 2018 y a pesar de que desde el verano se quedó sin producción suficiente, multiplicó por tres el número de matriculaciones de unidades alimentadas por GNC.

SEAT hace pivotar su oferta TGI sobre los modelos Ibiza, Arona y León (cinco puertas y ST), incorporándose además como una alternativa mecánica más, es decir, conservando su abanico de versiones desde Reference hasta FR. El principal cambio que experimentan estos modelos es que respecto es que reducen el depósito de gasolina hasta darle un papel meramente auxiliar (nueve litros de capacidad) para hacer sitio a uno tercero de GNC que incrementa la autonomía de este combustible, una demanda de los clientes de este tipo de vehículos.