Noche de pesadilla. Mientras la cara norte dormía bajo una copiosa lluvia que refrescó el caluroso día de verano, la Cumbre vivía una madrugada desvelada ante el incendio que sigue sin control, cerca Tejeda y obliga a evacuar los pueblos de Artenara y Juncalillo, así como varios barrios. Anoche se produjo un conato de incendio en La Culata, ya estabilizado aunque obligó a desalojar a decenas de personas.