María continúa muy grave, ingresada en la UCI del hospital. La operaron ayer a vida o muerte después de que su marido la degollara en Bollullos Par del Condado, en Huelva. Se salvó gracias a su hijo de 8 años, que fue corriendo a pedir ayuda a la vecina. El pequeño lo presenció todo y está muy afectado, atendido por psicólogos. Fue crucial también la ayuda del hermano del agresor, que es médico. Acudió rápidamente a la casa y le hizo un torniquete a María. Tuvo la serenidad de atenderla a pesar de que su hermano acababa de suicidarse tirándose de la azotea. Nadie en Bollullos comprende qué le ha pasado a Pepe, el agresor, de 55 años. Un conocido y querido abogado de familia. María nunca le había denunciado y parecían muy unidos. La Policía Científica sigue hoy recogiendo pruebas en la casa.
