Mundial 2022

CA Kimberley, el único club que ha ganado un partido del Mundial (1978)

Francia tuvo que usar la camiseta de un modesto club de Mar del Plata por coincidencia de colores con Hungría

Francia jugó de verdiblanco en 1978

Francia jugó de verdiblanco en 1978 / Getty

Javier Giraldo

Javier Giraldo

El partido que iba a enfrentar a Francia y Hungría en el estadio José María Minella de Mar del Plata el 10 de junio de 1978 no había despertado demasiada expectación porque ambos equipos ya estaban eliminados, pero pasaría a la historia por un hecho muy curioso e impensable en el fútbol actual.

Durante el calentamiento, un jugador francés, Henri Michel, se acercó a un jugador húngaro, Andras Torocsik, intrigado por el cuello blanco que asomaba bajo la chaqueta del chándal de Hungría.

‘¿Camiseta blanca?’, preguntó. El húngaro le dijo que efectivamente, su equipo jugaría con una camiseta blanca.

Francia y Hungría se habían presentado al partido con sus camisetas suplentes. Ambas de color blanco. El error había sido del jefe de la delegación francesa, Henri Patrelle, que había pasado por alto la notificación de la FIFA que requería a Francia jugar de azul.

Ni Francia ni Hungría habían llevado al partido sus equipaciones reserva, así que el problema era mayúsculo.

Un nombre de curioso origen

Se resolvió cuando apareció en las conversaciones un dirigente del Club Atlético Kimberley, un modesto club de Mar del Plata, fundado en 1921 y llamado así porque uno de sus fundadores, el portero Pablo Albide, había quedado prendado con una película que había visto recientemente y que transcurría en las minas de diamante de Kimberley (Sudáfrica).

El dirigente del club argentino se ofreció a dejar las camisetas de su club: un coche de policía cruzó Mar del Plata para que las camisetas llegasen al estadio cuanto antes. El partido comenzó con 40 minutos de retraso. 

Francia, de verdiblanco

Así fue como Francia lució en un Mundial la indumentaria más extraña de su historia: camiseta a rayas verdes y blancas, pantalón azul y medias rojas. Y algunos números descuadrados, porque las camisetas del Kimberley estaban numeradas del 1 al 11. Rocheteau, por ejemplo, jugó con el ‘7’ a la espalda y el ‘18’ en el pantalón. 

Ganó Francia 3-1. Ganó también, por tanto, el Club Atlético Kimberley, que puede presumir de ser el único club del mundo con una victoria mundialista. Una de esas camisetas, con el dorsal ‘5’, luce en el museo de la FIFA. Del resto, nunca más se supo.

El caso del Kimberley ya se había repetido en Mundiales anteriores, pero curiosamente las selecciones que utilizaron camisetas de equipos locales siempre acabaron perdiendo. 

En 1934, el partido por el tercer puesto enfrentó a Austria y Alemania. Ambos jugaban de blanco y los austriacos utilizaron la camiseta del Nápoles. El partido lo ganó Alemania.

En 1950, México y Suiza se presentaron a un partido con camiseta roja. Se sorteó qué equipo utilizaría la del Cruzeiro y qué equipo podría usar la suya: ganó el sorteo México, pero su capitán se ofreció a usar la camiseta del club brasileño. México perdió 3-2. 

Finalmente, en 1958, la televisión sueca consideró que la camiseta blanca de Alemania y la celeste y blanca de Argentina no se distinguirían bien en las pantallas en blanco y negro. Argentina tuvo que jugar con la camiseta amarilla del IFK Malmö y perdió 3-1.