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Protagonistas

Pepe Mel, entre el querido y el desterrado

Deivid, a quien el técnico no quería en verano, y Mauricio Lemos, por el que suspiró, se disputan un puesto en Anduva

Pepe Mel, técnico de la UD Las Palmas, y Deivid, el sábado en el Estadio de Gran Canaria. QUIQUE CURBELO

A Pepe Mel se le abre un nuevo dilema para afrontar el partido del próximo domingo (17.30 horas, Movistar LaLiga) en Anduva. Ya tiene muchos, porque las 12 bajas confirmadas con las que cuenta le obligan a darle vueltas a la cabeza para confeccionar el equipo titular que deberá medirse al Mirandés. Pero ahora, además, aparece la elección del acompañante de Aythami Artiles en el centro de la defensa. Recuperado Mauricio Lemos tras cumplir un partido de sanción, el madrileño deberá elegir entre el querido y el desterrado.

Es decir, entre el propio Mauricio, por el que el preparador insistió hasta la saciedad al club para que se quedara, y Deivid, descartado desde el principio y que el sábado pasado salió por primera vez de inicio esta temporada. La duda le surge por una cuestión tan simple como el técnico quiso que fuera: su máxima es que, lo que funciona, no se toca. Y lo cierto es que la pareja formada por los dos grancanarios estuvo bien y dio muestras de consistencia, si bien cabe recordar que el Alcorcón, muy flojo en líneas generales, exigió muy poco a la defensa amarilla.

En cualquier caso, el central, para su nulo ritmo de juego, estuvo correcto y cumplió. Hubo alguna jugada en la que la perdió la posición y generó un hueco a su espalda, pero nada más allá de la pura falta de competición. No lo tuvo fácil, pues el público del Gran Canaria le recibió con pitos -que desaparecieron con el paso de los minutos-, pero el llamado miedo escénico no le afectó.

Verano incierto

La vida de Deivid en la UD Las Palmas fue incierta durante buena parte del verano, cuando fue descartado por el club y por el propio entrenador y, por tanto, señalado para abandonar la plantilla, entre otras cosas porque, más allá de su elevada ficha, no contaba a nivel deportivo. Hay un dato que lo dice todo: sólo jugó 10 partidos en el curso 2018-19 con tres entrenadores distintos.

Mel, incluso, no reparó en decir varias veces en público que su idea era que el '15', entre otros jugadores como Javi Castellano o Tomás Pekhart, todos titulares, por otra parte, frente al cuadro alfarero, lo iban a tener muy difícil para jugar, en una clara invitación a que hicieran todo lo posible para abandonar la plantilla.

Al final, el devenir del mercado estival acabó con Deivid -y Javi Castellano y Pekhart- en un plantel con seis centrales -Aythami, Mantovani, Mauricio, Curbelo, Álex Suárez y el propio Deivid- y como última opción para Mel. De hecho, hasta el sábado sólo había jugado siete minutos en todo el campeonato y, además, como mediocentro -ante la Ponferradina-, el lugar donde el madrileño le dio cobijo ante el exceso de futbolistas en su posición natural.

Si bien el técnico dejó muy claras sus intenciones con Deivid, con Mauricio fue mucho más radical, pero en el sentido contrario. Lo que hizo Mel fue insistir una y otra vez al club en que hiciera todo lo posible para que se quedara, contrariamente a la intención de la entidad, que siempre quiso quitárselo de encima. Al final, el charrúa no encontró ningún club que quisiera igualarle la ficha y se quedó. Sin embargo, todavía no le ha respondido.

"He hablado con él muchas veces y sabe que hice todo lo posible por que se quedara. El club, llevado por mi insistencia, también. Él tiene que responder ante sí mismo y ante un entrenador que ha dado la cara por él. Un futbolista se examina cada siete días. Tiene que mejorar muchos aspectos que, de momento, no consigue superar. El entrenador está para que funcionen las cosas y, si no funcionan, hay que cambiarlas", advirtió el preparador tras la derrota en Zaragoza.

En ese encuentro, Mauricio fue expulsado de manera absurda por una falta innecesaria en los instantes finales y con el choque sentenciado. Antes, a los tres minutos, había cometido un error de bulto que acabó en el primer gol maño. Ahora vuelve a estar disponible y es a Mel quien corresponde elegir entre el querido y el desterrado.

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