Muere Estela Ossorio Rodríguez, ‘Estelita’, vecina querida y reconocida de Gáldar

Residente en la céntrica calle Drago, es la matriarca de una familia de barberos muy conocida por el apellido.

Estela Ossorio recibe de Teodoro Sosa y Nuria Vega un reconocimiento en la Semana de la Democracia Local

Estela Ossorio recibe de Teodoro Sosa y Nuria Vega un reconocimiento en la Semana de la Democracia Local

Estela Ossorio Rodríguez, más conocida como ‘Estelita’, vecina muy querida en el municipio, falleció este martes a los 100 años de edad. El Ayuntamiento de Gáldar reconoció su labor altruista en la Semana de la Democracia Local de 2021. 'Estelita', nacida el 15 de junio de 1922 en la localidad de Jesús del Monte, en La Habana (Cuba) y residente en la céntrica calle Drago, es la matriarca de una familia de barberos muy conocida por el apellido.

Teodoro Sosa, alcalde de la ciudad, mostró sus condolencias a su familia y amigos «por la pérdida de una gran persona implicada por el desarrollo de su familia, que siempre participó y disfrutó de las Fiestas Mayores de Santiago y muy querida especialmente en el casco, donde fue un gran ejemplo por su generosidad y solidaridad hacia los demás». Su capilla ardiente ha sido instalada en el tanatorio municipal, su sepelio tendrá lugar en el cementerio de San Isidro y el funeral en la parroquia de Santiago de Los Caballeros.

A los tres años de edad se trasladó junto con su madre, Emilia, y sus dos hermanos, Manolo y Emilio, a Gáldar, la ciudad natal de su padre, Juan, que no pudo viajar por motivos de trabajo. En nuestra ciudad convivió con sus tíos. En la Guerra Civil sufrió la muerte de un tío que ejercía las funciones paternales en la ausencia de su padre. Ya a los catorce años volvió su padre de Cuba y se incorporó al negocio familiar de la barbería. En su juventud conoció a quien sería su marido, Antonio Díaz Godoy, de cuyo matrimonio nacieron seis hijos, cinco hombres y una mujer.

En sus primeros años de casados, vivieron en San Roque, en Santa María de Guía. Posteriormente, por motivos laborales de su esposo fueron a residir a Las Palmas de Gran Canaria, aunque siempre con la ilusión de regresar a su querida Gáldar, a la que volvió para instalarse definitivamente. Ossorio logró la ilusión de regresar algún día a Cuba gracias a un viaje organizado por el Ayuntamiento. En su larga vida ha destacado como una mujer emprendedora, activa y fue la primera secretaria del Club de la Tercera Edad de Gáldar. Ossorio disfrutaba de una larga familia que componen 15 nietos, diez bisnietos y una tataranieta.