Ocho años pasó el protagonista del serial Prison Break, Wentworth Miller, trabajando en secreto en su primer guión y buscando productora con seudónimo para que no se confundiera con un capricho de estrella.

Los hermanos Scott, antes de la muerte de Tony, decidieron producir el afi lado argumento de Miller sobre la misteriosa familia Stoker.

Todo empieza cuando el padre de una introvertida joven muere en accidente.

Al funeral acude el inquietante hermano del fallecido para consolar a su inestable viuda.

Lo hará, en todos los sentidos, al tiempo que establece con su sobrina una complicidad que la alejará de su ostracismo y le descubrirá su inesperado destino.

Además del exquisito guión, la crítica ha elogiado las interpretaciones de Nicole Kidman y Jacki Weaver, la química entre Matthew Goode y Mia Wasikovska y la atmósfera creada por el director coreano Park Chan-Wook en su debut americano.