Durante una emisión en directo de las noticias del canal australiano 9 News, los espectadores pudieron presenciar un momento de vergüenza ajena que pasará a la historia televisiva de esa cadena.

La presentadora del tiempo es sorprendida por uno de sus compañeros que se acerca a ella, la abraza y tras esperar el momento adecuado, intenta darle un beso. Ella reacciona inmediatamente e inevitablemente se crea un clima incómodo, de tensión, y en el que se hace evidente que el presentador acaba de hacer el ridículo más grande de su carrera.

A veces las sorpresas pueden salir bien, pero otras veces puede ocurrir lo peor que te puedes esperar.