El grupo Extremoduro regresa este viernes 7 de noviembre al Archipiélago para actuar en el Estadio de Gran Canaria tras casi una década sin visitar las Islas. La banda de Robe Iniesta ofrecerá un concierto de tres horas de duración, con una pausa de 20 minutos, que se iniciará a las 22.00 y en el que presentará las canciones de su último trabajo, 'Para todos los públicos' , un homenaje que el grupo hace a sus seguidores. La apertura de puertas será alrededor de las 20.00.

Se trata de la penúltima actuación de la actual gira de la banda de Plasencia que finalizará al día siguiente en Santa Cruz de Tenerife en el anexo al Auditorio de Tenerife Adán Martín. De momento, según fuentes de la productora, se han vendido 5.000 entradas de las 14.000 que acoge todo el aforo.

La banda de Robe Iniesta, voz y guitarras; Iñaki Uoho Antón, guitarras, teclados y coros; Miguel Colino, bajo; y José Ignacio Cantera, batería, llega a las Islas tras ofrecer cerca de 40 conciertos por toda España. El grupo conserva toda la magia que lo ha convertido en uno de los más exitosos del país, y que, como ellos mismos han aclarado, se basa en un rock transgresivo, que bebe igual del sonido urbano como del progresivo, pero acompañado de la lírica callejera que ha sido uno de sus grandes atractivos.

El espectáculo contará con un equipo de escenario de cuarenta toneladas, cuatrocientos metros de superficie y dieciséis de altura, y se utilizarán los 400.000 vatios de luces y 200.00 vatios de sonido que la banda ha llevado en todos los conciertos que ha realizado a lo largo y ancho de la geografía española. Como principales atractivos hay que destacar que, dentro de las paredes laterales y al fondo de escenario, habrá una escenografía original diseñada y construida a medida especialmente para esta gira.

La logística para hacer funcionar todo esto consiste en seis tráileres, una grúa de 60 toneladas con 40 metros de pluma y varias carretillas elevadoras para mover piezas de 3.000 kilogramos que estará dirigido por un equipo técnico de la gira y que, con la ayuda de personal auxiliar de cada ciudad por la que han pasado, supera finalmente el centenar de personas.

El grupo presentará las canciones de 'Para todos los públicos', que alternará con las que en su tiempo les convirtieron en lo que hoy son y que están en la memoria colectiva de muchos amantes del rock español. El precio anticipado es de 25 euros más gastos de distribución y de 30 euros en taquilla.

La gira de Extremoduro se inició en mayo pasado y después de casi cuarenta conciertos en los que la banda ha llenado todos los recintos, se espera un final apoteósico en Canarias, no solo porque finaliza el tour 'Para todos los públicos', sino porque una de las claves del grupo es que cada concierto es diferente, con señas de identidad propias. La actuación del viernes será la penúltima parada de la gira nacional que hará el grupo este año.

El público estará distribuido en grada y pista. La entrada es la misma para ambas, pero, debido a que el escenario se ha colocado encima del propio tartán, el aforo de esta zona es tan sólo para 2000 personas. Por este motivo hay un control para que, en ese momento, la gente no pueda seguir accediendo. En todos lados del estadio habrá puestos de comida y bebida.

Extremoduro actuó por primera vez en Gran Canaria el 23 de octubre de 1993 en el pub La Calle. Su propietario en aquel momento, Juan Salán, actual director de la productora que asume el trabajo local del concierto, recuerda que, por entonces "la gente ya sentía por Robe Iniesta mucho fervor, era un auténtico objeto de culto, significaba el catecismo para muchos jóvenes". Salán destaca que ya entonces eran muy importantes y el músico se portó muy profesionalmente. "Estuve viéndolos en Sevilla hace unos días y me encontré con la misma exaltación de la gente cantando sus canciones, el grupo no ha envejecido", aclara. El productor también destaca que el abanico de seguidores es muy amplio, muchos de ellos atraídos por ese rock urbano con poesía callejera que es su marca de la casa.