Bajo el título Mierda de artistas se presenta un proyecto comisariado por los artistas Raquel Ponce y Gregorio Viera que «ofrece un resultado expositivo-instalativo, desde un proceso performativo constituido a partir de la basura de creadores». Los comisarios plantean que no se trata de «arte reciclado o trash art. No es arte de/con/sobre la basura al uso, ni transformación artística de la misma. Tampoco se trata de restos procesuales, ni de sobras o despojos de piezas artísticas, sino aquello que en algún momento fue susceptible de haberse convertido en obra artística, protopiezas que en última instancia terminaron siendo desestimadas, o que en algún momento fueron parte de la actividad expositiva del artista, pero ya no más».