El Festival de Cine de Tribeca arranca esta semana con un mayor énfasis en las películas independientes extranjeras que se presentan a concurso, estrellas como Justin Bieber en la alfombra roja y un programa más amplio ahora que entra en su segunda década de existencia.

El festival, uno de los mayores de Estados Unidos y cofundado por Robert De Niro como una forma de revivir Manhattan tras los ataques del 11 de septiembre, arranca este miércoles con una comedia hollywoodiense de alto perfil, Eternamente comprometidos, con Jason Segel y Emily Blunt.

Pero el festival que se extenderá hasta el 19 de abril presenta en su mayoría cine independiente. De casi 6.000 propuestas, Tribeca 2012 proyectará 89 películas, 57 de ficción y 32 documentales, incluyendo 50 estrenos mundiales.

La mitad de las doce películas de ficción a competición son producciones internacionales, incluyendo Yossi, una cinta israelí sobre un gay que no ha salido del armario en Tel Aviv, y The Girl, una coproducción entre Estados Unidos y México con Abbie Cornish interpretando a una madre soltera de Texas que en dificultades que ayuda a pasar inmigrantes por la frontera.

War Witch está rodada íntegramente en el Congo y cuenta la historia de la angustiosa vida de una joven desde que los señores de la guerra asaltaron su aldea.

Entre los documentales, The World Before Her establece paralelismos entre las mujeres que se presentan al concurso de belleza de Miss India y un campamento femenino de fundamentalistas hindúes. Será el que abra la competición de documentales.

Este es el primer año que los organizadores de Tribeca han seleccionado películas a concurso para la noche inaugural, y el programa global refleja una variedad de cintas de todo el mundo en lugar del típico plantel eminentemente europeo, según dijo el jefe creativo de Tribeca, Geoff Gilmore.

"A veces había falta de consistencia", dijo sobre el programa de los últimos diez años. "Creo que una de las cosas que se buscan es el tipo de descubrimientos y diversidad que tenemos en el programa de este año".

Encajado entre el festival de cine indie de Austin, Texas, y el festival francés de Cannes, que tiene la reputación de proyectar algunas de las mejores películas del mundo, Tribeca presenta en esta edición poco más de la mitad de películas que en los seis años anteriores.

"Cannes proyecta sólo unas pocas películas, y hay muchas otras cosas con las que podemos generar atracción y lo hacemos", dijo Gilmore. "Siento que estamos en una nueva fase, ya llevamos diez años de Tribeca... y ahora estamos entrando en la siguiente década"