Un asesino en serie de la vida real y un enfermero que desarrolla profundas relaciones con pacientes terminales son solo dos de los personajes que ilustran el rango interpretativo del actor británico Tim Roth, quien se considera afortunado de tener en su haber "toneladas" de papeles que ha amado.

Roth, nacido en 1961, trabaja actualmente en una miniserie de tres capítulos para la BBC llamada Rillington Place, nombre que alude al domicilio en que John Christie asesinó a numerosas mujeres en Notting Hill, Londres, entre 1943 y 1953.

En una conversación telefónica con Efe desde Escocia, uno de los sitios en que se filma la serie, Roth confiesa que interpretar a Christie no ha sido fácil. "Es un ser humano horrible. Pero uno tiene que hacer eso a un lado", cuenta.

Refiere que en su preparación para el papel tuvo acceso a numerosos documentos que registran entrevistas a Christie y a personas de su entorno, así como a reportes de prisión.

"Y después, una vez que se ha hecho esa clase de investigación, uno simplemente deja eso atrás y piensa acerca de lo que lo hacía feliz, y lo que lo hacía feliz, de ser posible, era asesinar y atacar sexualmente mujeres", explica el actor.

En opinión del también productor y director, lo que hacía de este individuo un monstruo era su herencia genética. "Es un psicópata. No creo que alguna vez sintiera culpa. Pienso que no le alegró que lo atraparan, pero eso es todo. Es una historia muy extraña y complicada la de este hombre", añade.

Con su acento londinense que virtualmente desaparece cuando interpreta personajes estadounidenses, Roth señala que un actor trata de encontrar algo de sí mismo que pueda aportar al personaje al que da vida, lo que se complica con alguien como Christie. "Depende del personaje, realmente, y ha sido extraño interpretar a algunos", reconoce.

Al preguntársele si siente alguna presión por el hecho de que otro actor británico, Richard Attenborough (1923-2014), también representó a Christie en la cinta 10 Rillington Place, de 1971, Roth replica "No, fue hace mucho tiempo", y deja escapar una risa espontánea.

"Pienso que él pasó un tiempo horrible, que odió interpretar al hombre, por lo que sé", continúa, más serio, el protagonista de la serie de televisión Lie to me (2009-2011).

Los asesinatos de Rillington Place tienen una relevancia especial en la historia británica porque la condena y ejecución de un hombre llamado Timothy Evans, por un asesinato que más tarde se descubrió que había sido cometido probablemente por Christie, contribuyó a la abolición de la pena capital en el Reino Unido.

Retomando el tono ligero, Roth insiste en que no siente preocupación alguna por estar a la altura de Attenborough. "Cuando interpreté a Vincent Van Gogh (Vincent & Theo, 1990), ya Kirk Douglas lo había hecho antes (Lust for Life, 1956) y Martin Scorsese lo hizo después, con (Akira) Kurosawa (Dreams, 1990)", señala.

Y añade, con cierta socarronería: "No me preocupa, realmente. La comparación es para el público y para la prensa, no para mí".

En contraste con la personalidad de Christie, el actor encarna en la película Chronic, que acaba de ser estrenada en México, al enfermero David, a quien describe como "un ser humano profundamente atento y amoroso".

"Es alguien que cuida personas al final de sus vidas, que están es circunstancias desesperadas. Y es muy bueno en su trabajo, tiene una extraordinaria compasión y empatía. Pero también tiene dentro de sí algo, un evento trágico del que fue parte en su pasado y con el que vive. Así que es un ser humano profundamente complicado y atormentado", expresa.

Acepta que la preparación para este papel "fue muy difícil, debido a la naturaleza del tema, que es lidiar con el final de la vida, algo que a todos, al envejecer, nos pone más y más nerviosos". Y también "es un tema que no es discutido abierta e inteligentemente en la arena pública", subraya.

"Pero una vez que se hizo la investigación fue muy fácil, porque es actuación, y trabajé con actores maravillosos y un director extraordinario", afirma, refiriéndose al mexicano Michel Franco, de quien dijo que es "uno de los mejores cineastas y una de las personas más talentosas" con las que ha trabajado.

Sobre cuál ha sido su papel favorito hasta ahora, asegura que nunca ha sabido responder esa pregunta. "Pienso que he tenido mucha suerte en que, mientras la mayoría de los actores apenas consiguen un papel que aman, yo he amado desde mi primer trabajo en Made in Britain (1982)", dice sobre su papel del joven "cabeza rapada" Trevor.

"Amé el personaje que interpreté en Meantime (1984), amé Vincent. Pienso que David, en Chronic, me ha dado uno de los mejores tiempos que he tenido como actor. He amado Reservoir dogs (1992), Pulp Ficton (1994). He interpretado a Gregor Samsa en Metamorfosis (1987) hace muchos años, en escena, y fue una experiencia fantástica", recuerda Tim Roth.

Agradece tener "muchos, muchos ejemplos, a un nivel personal", de lo que ha disfrutado de ser actor.

"Así que he tenido toneladas (de papeles). Pero he estado en el negocio mucho tiempo", admite. Y vuelve a reír con desenfado