Calificación: *** | Colombia, Argentina, Uruguay, Holanda, Alemania, Suecia, Suiza, EEUU y Dinamarca, 2019. Director: Alejandro Landes. Guion: A. Landes y Alexis Dos Santos. Fotografía: Gasper Wolf. Música: Mica Levi. Intérpretes: Moisés Arias, Julianne Nicholson, Sofía Buenaventura, Julián Giraldo, Karen Quintero, Deiby Rueda, Paul Cubides, Laura Castrillon, Sneider Castro. Duración: 102 minutos.

Una incursión en el corazón de la jungla colombiana que llama poderosamente la atención por la credibilidad extrema de unos personajes que da la impresión que están asumiendo sus propios cometidos. Forjado en el documental, fruto de haber debutado en el cine con un largometraje del género muy elogiado por la crítica, 'Cocalero', Alejandro Landes consigue meter de lleno al espectador en un paisaje, la Colombia más verde y oculta por una selva tropical, que rompe su belleza y su frondosidad por el sonido de unas armas que han convertido a unos adolescentes en guerreros dispuestos a matar por orden de sus mandos militares.

El tema siniestro, en suma, de los niños de la guerra que ha tomado cuerpo en numerosos países del tercer mundo y que en este escenario latinoamericano ha sido uno más de los recursos de las FARC, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, en su actividad de lucha de guerrillas.

La cinta ha sido un auténtico fenómeno internacional, haciéndose con el Premio del Jurado en el Festival de Sundance y siendo premiada en 45 certámenes de los 46 en los que se ha presentado. Con claras influencias de dos películas basadas en sendas novelas de indiscutible impacto, 'El señor de las moscas' de William Golding y 'El corazón de las tinieblas' de Joseph Conrad, el director ha sabido adueñarse de la pantalla a base de efectuar una descripción impecable de unos niños que viven una experiencia única y trágica.

En sus vidas han irrumpido, sobre todo, la violencia y una sexualidad precoz, hasta el punto de que actúan con una agresividad y una disciplina castrense que se apoya en el uso permanente de las armas. La misión que se nos muestra es la que originó el secuestro de una doctora norteamericana a la que las FARC utilizaron como rehén. Y por encima de todo sobresale la actuación de unos jóvenes tan auténticos que forman parte del paisaje humano. Es verdad que hay algún conato de reiteración porque la vida cotidiana es más de lo mismo, aunque no llega a desestabilizar ningún factor esencial.