Tras dos años alejada de la pequeña pantalla, Jose Toledo regresa a Telemadrid para conducir Doble Página, un nuevo magazine en el que comparte plató con el santanderino Quico Taronji.

Casada desde hace veintisiete años con Cristóbal Martínez-Bordiu, la presentadora canaria disfruta mimando a sus dos hijos, Daniel y Diego, que aunque ya cuentan trece y veintidós años, siguen siendo sus dos mayores tesoros.

Saltó de la moda a la televisión de la mano de Los 40 principales y con programas tan míticos como Gente o Cartelera dejó huella en los hogares españoles de la mano de Televisión Española, ahora regresa a ellos con noticias de actualidad, sucesos y crónica social.

Además de por su regreso a la pequeña pantalla, Jose está muy contenta porque su hijo Daniel se ha recuperado completamente del grave accidente de moto que sufrió en la finca de la familia el 25 de marzo de 2009 cuando practicaba trial. Daniel, que entonces tenía 18 años, chocó contra un cable que no vio y que estuvo a punto de seccionarle el cuello.

A raíz del percance, el joven tuvo que someterse a una delicada intervención quirúrgica para reconstruirle la tráquea, que a consecuencia del impacto había sufrido una fuerte luxación.

- ¿Cómo están tus hijos?

- Los dos creciendo, buena gente que es lo que más importa, crecen demasiado rápido. Ya están los dos formándose, que es lo que toca ahora y muy contentos con lo que han elegido.

- ¿El mayor ya está recuperado de su accidente de moto de 2009?

- Sí, todo aquello pasó, gracias a Dios y después de casi tres años ya está totalmente recuperado.

- ¿A que se van a dedicar?

- El pequeño todavía no lo tiene claro y el mayor estudia Negocios, de momento ninguno ha querido seguir mis pasos.

- ¿Tenías ganas de volver a televisión?

- Muchas, he estado trabajando toda mi vida, dieciséis años ininterrumpidos en televisión y tras dos sin hacerlo me apetecía mucho retomar el ritmo.

- ¿Cuáles son las grandes bazas de 'Doble Página'?

- Telemadrid, la productora Cuarzo y nosotros, que contamos sucesos, actualidad y una página un poco más amable de crónica de sociedad.

- ¿Eres consciente de que el público te quiere?

- Lo que noto es que soy una cara familiar porque me paran por la calle para felicitarme, incluso por programas que presenté en mis comienzos y todos los comentarios que recibo son muy halagadores, le agradezco mucho al público que me haya abierto sus hogares.

- ¿Has tenido que cambiar mucho tus rutinas caseras para incorporarte de nuevo al trabajo?

- No mucho, el horario me es absolutamente familiar, siempre he trabajado de tarde, así que como cualquier madre que trabaja intento hacerlo lo mejor que puedo. Aprovecho la mañana para hacer todo lo relacionado con la casa, ir al supermercado y demás y luego me marcho a trabajar.

- ¿Te van a echar de menos en casa?

- Espero que sí sobre todo yo a ellos porque aunque ya son muy mayores me encanta mimarlos.

- Si tuvieras que elegir...

- No podría, disfruto muchísimo ocupándome de mi casa con mi marido y mis hijos pero también trabajando, me dedico a esto desde los diecisiete años. Lo bueno es no renunciar a nada, es difícil según a qué te dediques pero se puede conseguir.

- ¿Con qué programa sueñas?

- Me quedan muchos campos por investigar, me encantaría presentar algún día un concurso al estilo de Sobera.

- Sorprendería verte en un formato tan distendido...

- Si no soy seria, serena tal vez pero seria no.

- ¿Qué haces para estar tan estupenda?

- Pasar por maquillaje, por peluquería, una bonita ropa, una maravillosa luz y voila, ya tienes el resultado, agradezco el cumplido pero lo años pasan para todos.

- Tu marido se llama José Cristóbal, ¿esto da problemas en casa?

- Le conocí como Cristóbal pero su familia le llamaba José, yo estaba lejos de casa y al menos el nombre tenía que mantenerlo así que fue él quién cedió por mí.

- ¿Cual es el secreto de veintisiete años de feliz matrimonio?

- No lo hay, se trata de una decisión personal diaria que se hace, el amor es eso una demostración diaria. Todos los días tienes en tu mano la posibilidad de elegir si acabas con ello o lo riegas para que continúe. Como todas las parejas tenemos nuestros días buenos y nuestros días malos y ahora después de tanto tiempo incluso podemos hablar de años buenos y años malos pero seguimos luchando por respetarnos, comprendernos, amarnos y disfrutar de la vida juntos.

- ¿Celebrasteis las bodas de plata?

- No, no las hemos celebrado, hablar de años es siempre una faena.