Guionista, actor y cinéfilo; Berto Romero ha conseguido aunar tres de sus "versiones" en su nuevo programa, "MovieBerto", para poner al cine la "salsa" del humor, un campo que conoce bien y para el que se impone escasos límites en unos tiempos en que "frivolizar es la única opción de quien no tiene poder".

El "showman" catalán (Cardona, Barcelona, 1974) presenta en pequeños monólogos en Paramount Channell una película de las que emite este canal especializado, hasta un total de 52, algunas de las cuales ha elegido él mismo porque "generan historias divertidas", y que comenzará este viernes con "La caza del octubre rojo", explica en una entrevista con Efe.

En el programa de mañana recurre a dos muñecos que le representan a él y a Andreu Buenafuente para recordarle a este que ahora es "el segundón", un guiño a la trayectoria de ambos, que siguen juntos en el programa "En el aire" (La Sexta).

"La sombra de Buenafuente es muy alargada, pero a mí no me molesta", señala Romero sobre esta aparición anecdótica de su "jefe", que achaca son su ironía marca de la casa a "una campaña orquestada por todo el mundo para tenerme siempre solapado".

Para escribir los guiones de "MovieBerto" ha juntado su "medio cerebro" con el su amigo de juventud y compañero en el Terrat Rafel Barceló, con quien ha visto "mucho cine" y comparte "mucha imaginería y teorías de mierda" sobre muchas películas, sobre todo de ciencia ficción y de terror, sus favoritas.

No obstante, frente a la cámara, como suele hacer en su vida diaria, se "dejar ir" un poco para ponerles "salsa" al trabajo.

"La lucha contra la rigidez es la definición de mi trabajo. Intento que las cosas no queden ortopédicas", añade el reciente candidato al Goya por su papel en la película "3 bodas de más".

La cinematografía no podía ser un campo ajeno al humor: "Toda mi cultura está construida con películas, es lo que siempre me ha gustado desde pequeño, y tenía ganas de hacer una aproximación humorística al cine", dice.

El humor no siempre es bien entendido, como le ha ocurrido a Berto y su jefe con las protestas de la banda femenina católica Flos Mariae a las parodias que han hecho de ellas en "En el aire".

"La sociedad se define ahora porque todo el mundo protesta y se rasga las vestiduras, aunque luego la forma en que ponemos remedio a las cosas queda un poco difusa", señala sobre este asunto, y añade: "La sentencia definitiva de algunos es que no debemos frivolizar sobre algunos asuntos, y esta es una ley mordaza no solo para el humorista, sino para todo el mundo".

"Es la manera de decirte, cállate y deja hablar a los que saben, que suelen ser quienes quieren joderte la vida", apunta, y concluye que "frivolizar es la única opción que tenemos los que no tenemos poder".

Por eso el reportaje "Operación Palace" de Jordi Évole le pareció "bonito", un "ejercicio estilístico muy trabajado, que consiguió su objetivo, reflexionar sobre los límites de la verdad y la mentira".

Romero atribuye el enfado generado ante el falso documental del 23-F al hecho de que "la gente odia sentirse tonta, porque nos creemos más de lo que somos, pero tendríamos que empezar a darnos cuenta de que todos somos tontos en algún aspecto, eso es lo divertido".

Fundador de la compañía artística El Cansancio, Berto Romero continúan girando por teatros con su espectáculo "Sigue con nosotros", de monólogos y música, "muy de reírse" y con un solo límite: "El sentido común para no ofender a personas que no lo merecen".