La televisión es un sitio perfecto para las reivindicaciones, las protestas o el mero placer de verse en la denominada ´caja tonta´.
Es lo que suelen perseguir los espontáneos, protagonistas más o menos frecuentes de apariciones en diversos programas, ya sea informativos, concursos, tertulias e incluso eventos como Eurovisión, con el inefable Jimmy Jump. A continuación, hacemos un repaso de algunas de estas inesperadas ´intromisiones´.
Carlos Díaz, un sevillano de 39 años, ha sido el último en colarse en un plató de televisión. En apenas un lapso de tiempo de horas, apareció en los estudios de TVE y La Sexta para hacerse con un plano en la segunda edición del ´Telediario´ de Ana Blanco y ´Más Vale Tarde´ de Mamen Mendizabal.
En su blog, Díaz asegura que los servicios secretos de Estados Unidos y el Reino Unido ejecutan una "guerra siniestra" y que la CIA es responsable, entre otros asesinatos, de la muerte de Manolo Escobar y Alvaro Bultó.
Díaz se escondió durante horas en el cuarto de baño del edificio de RTVE para evitar miradas indiscretas. En el espacio de La Sexta, pidió la palabra para insistir en su denuncia. "Me llamo Carlos Díaz Fernández y denuncio una serie de crímenes secretos. Por favor, prestadme un segundo de atención". "No creo que este sea el contexto, Carlos. Luego hablamos contigo", le contestó Mamen Mendizábal.
Sin duda, Jimmy Jump es el espontáneo más reconocido en las televisiones españolas. En el año 2010, se atrevió incluso a estropear la actuación del representante español en Eurovisión, Daniel Diges. Jaume Marquet i Cot , que así es como se llama, simuló ser uno de los bailarines de la coreografía. Casi siempre ataviado con algún distintivo del Barcelona, Jimmy Jump también ha hecho su aparición en partidos de fútbol, como cuando lanzó una bufanda culé a la cara de Luis Figo en un partido de Portugal, y también de tenis (quiso ponerle una barretina a Roger Federer).
Otro de sus momentos más recordados llegó en la gala de los Goya del año siguiente, cuando agradeció desde el atril el premio que iba destinado a Javier Bardem ante la atónita mirada de Lola Dueñas, que entregaba el galardón. Lo más sorprendente de aquel momento es que el espontáneo logró acceder a la gala con una invitación.
En los premios Goya de 2012 también es recordada la aparición de ´El muletilla´, un espontáneo que solicitaba a los productores allí presentes que invirtieran dinero en Extremadura para rodar allí "el primer Western extremeño". Ocurrió cuando a Isabel Coixet iban a entregarle el premio a mejor documental por su trabajo sobre Baltasar Garzón.
