El joven canario Alberto Pérez -@albertops2020 en Instagram- tenía 29 años cuando en su adolescencia descubrió que era homosexual y buscó terapias que prometían poder convertirle en heterosexual. Llegó a convencerse de que había conseguido sanarse de esta “terrible enfermedad”, le decían, y por increíble que parezca “aún hay charlatanes y lo que es más grave psicólogos y psiquiatras que ofrecen este tipo de pseudo terapias que carecen de todo rigor científico”, denunció.

Pérez, que acudió el pasado domingo al programa Viva la Vida de Telecinco, conducido por Emma García, contó que con 18 años fundó una organización en la que compartía su “testimonio de curación” y junto a un equipo decían poder quitar la homosexualidad como si de un vicio se tratara. Pérez, con el paso del tiempo y tras una crisis personal, se dio cuenta que lo que hacía no tenía sentido. “Las terapias de conversión no sólo no funcionan sino que son dañinas dejando duras secuelas en aquellos que se someten a este tipo de aberrantes prácticas”, dice. Pérez hoy en día comparte su historia para que nadie vuelva a pasar por lo que él sufrió y en su nueva realidad, la aceptación y amor propio, se infiltró con una cámara oculta en una sesión de terapia con una “pseduo terapeuta” en Madrid para hacer una denuncia pública de que esto sigue sucediendo. Pérez mostró en Telecinco esas grabaciones y expuso estas pseudo terapias compartiendo también su testimonio de superación. En España sólo algunas comunidades autónomas prohíben en su legislación de manera tajante las terapias de conversión, como Madrid y Valencia. Recientemente la ONU instó a los países miembros a hacer esfuerzos para combatir estas prácticas. En palabras de Alberto, “las terapias de conversión son un camino a ninguna parte, un callejón sin salido que lo único que hacen es perpetuar el estigma y la discriminación. La homosexualidad no es una enfermedad. No hay nada que curar ni nada que cambiar”, dice.