Ángel Rafael Cerdeño, corresponsal de Telecinco en Venezuela, ha muerto a los 38 años. El periodista ha fallecido de forma repentina, tal y como ha explicado su compañera en Nius Diario, Esther Yáñez, que ha contado en la página de Telecinco cómo se sucedieron los fatales hechos en Caracas, en un texto que evidencia la mala situación en el país latinoaméricano, donde este viernes, 1 de octubre, se eliminarán seis ceros de su moneda y se introducirá el bolívar digital.

La muerte de Cerdeño es un ejemplo más de la situación precaria que vive Venezuela, un país colapsado política y económicamente, donde todos los venezolanos son millonarios a cuenta de los ceros de su moneda. En la actualidad, Venezuela es el país que posee el 'récord' de la mayor inflación a nivel mundial, una situación que sus gobernantes van capeando a fuerza de quitarle ceros a su moneda. En 2007, todavía con Hugo Chavez vivo, el país decidió eliminar tres ceros a la moneda y en 2018 volvió a repetir la operación, aunque aquella vez se eliminaron ocho ceros al bolívar. Ahora pierde otros seis más. En 14 años ha perdido 17 ceros. Algo muy difícil de entender al otro lado del Atlántico, pero que ayuda a comprender por el calvario que pasa un enfermo en el país y por la agonía que sufrió el periodista de Telecinco. Precisamente, la semana pasada el Gobierno de Canarias reforzó el apoyo sanitario a los emigrantes canarios en Venezuela, que viven en situación precaria, habilitando 5.605 tarjetas que se recargan cada mes para la compra de alimentos y medicinas.

Sanidad colapsada y falta de atención

De acuerdo con el relato de Esther Yáñez, a Cerdeño "no le pasaba nada, aparentemente". Todo comenzó el pasado jueves, cuando sintió molestias y sufrió un desmayo. En ese momento, el corresponsal de Telecinco "se embarcó en el periplo habitual de buscar un hospital que le atendiese en Caracas", algo parecido a una misión imposible.

Ángel, que llevaba 20 años casado con su mujer, Viviana, tenía tres hijos pequeños. El periodista no encontró un hospital para ser atendido en Caracas, con dos intentos fallidos para encontrar un centro hospitalario. “No podía respirar, pensé que iba a morir. Y así tocó recorrer otros hospitales hasta llegar al Clínico Universitario donde me atendieron a las patadas y en condiciones infrahumanas. Allí los pacientes Covid y no Covid permanecen en un mismo lugar (…) Venezuela es enfrentarte a un sistema de salud colapsado. Una cosa es que lo digamos en un reportaje y otra que lo vivamos en carne propia”, relata su amiga Esther que le dijo el mismo día en que se desmayó.

Reposo y amoxicilina

Finalmente, Ángel Rafael Cerdeño consiguió que le atendieran, pero entonces le dijeron que no sabían qué le pasaba, no le hicieron ninguna prueba y lo enviaron a casa con las indicaciones de que hiciera reposo y tomara amoxicilina, "uno de los pocos medicamentos que se encuentran en las farmacias", explican desde la web de 'Informativos Telecinco'.

El lunes fue la última vez que Ángel y su compañera hablaron: "Le pregunté qué tal estaba, qué necesitaba. Me mandó un mensaje de audio porque no tenía fuerza para escribir, me dijo. Cuando lo escuché se me pusieron los pelos de punta. Algo raro pasaba. Lo notaba en su voz, en su respiración, haciendo un sobreesfuerzo para comunicarse conmigo, porque Ángel siempre pensaba en los demás, porque era demasiado generoso como para no responderme. Solo me decía: “Esther, me estoy sintiendo muy mal”. Una hora después me comunicaron su fallecimiento", lamenta.